Sencillo, amante de la buena música y la tecnología. Encontró aquí un espacio para compartir experiencias que algún día formaron parte de su vida, dentro y fuera de los medios de comunicación. Y algunas cosas más... Welcome back my friends to my blog that never ends, I'm so glad you could attend. Come inside! Come inside!
Monday, November 30, 2009
RECORDANDO A RUBÉN ROJAS
La noticia nos sorprendió sobremanera. Todo iba bien. En Expreso yo me alistaba para participar por segunda vez en el festival Rock in Rio, a realizarse en enero siguiente en Brasil. En el Teatro Segura de Lima, un grupo de figuras peruanas dirigidas por Edmundo Delgado, entre las que se encontraban Carlos Guerrero, Ernesto Samamé, Saúl y Manuel Cornejo, Tavo Castillo y Gerardo Manuel, se preparaban para homenajear a John Lennon por el décimo aniversario de su partida. Polo y Luciano, de Trama, acababan de regresar del Viejo Continente; mientras Felipe, el bajista, se había quedado en España. Era 1 de diciembre de 1990. Esa mañana de sábado, el teléfono timbró en casa. Y una voz entrecortada nos pasó la ingrata noticia: "Rubén Rojas murió ayer". Así de directo recibimos el mensaje.
Rubén era el joven y correcto guitarrista de Dudó, el grupo que unos años antes me había tocado presentar en la Concha Acústica del Parque Salazar, cuando el simpático grupo ganó el concurso de Rock Urbano que había organizado la Discoteca Blanco y Negro con el auspicio del Municipio de Miraflores, en Lima. Pero no todo es alegría en la vida. Y Dudó sufrió. Porque estaba en una creciente etapa de su carrera. Porque se había convertido en una banda estable. Porque estaba trabajando en una nueva placa. Porque, finalmente, eran como amigos de toda la vida. Y sus amigos, fuimos a despedir a Rubén. Fue en la Quinta Heeren, en los Barrios Altos, muy cerca de donde los muchachos comenzaron sus sueños y enfrentaron a la vida desde el punto de vista del músico. Allí, a su lado, yacía muda su guitarra eléctrica.
Lo habíamos visto por última vez el 16 de noviembre cuando acompañó a Nina Mutal en su regreso a los escenarios. Fue en el Tarot Pub de la calle Comandante Espinar. Allí, el propio Rubén, llamado cariñosamente "La Bruja", nos recordó la invitación para que al día siguiente asistiéramos al festejo de los primeros seis años de la formación oficial del grupo. Iban a realizarla en la Quinta Heeren. Pero, otro compromiso simultáneo en el colegio Claretiano (presentar a Frágil, Miki y Los Inocentes), nos impidió llegar hasta allí. Nos contaron que la celebración los hizo tocar hasta altas horas de la noche.
Además de Rubén, formaban el grupo, Miguel Tapia en la voz y bajo, Magno Llactas en guitarra, Freddy Neyra en teclados y Octavio Medina en batería. Ese fin de semana, de sábado a domingo, Dudó tenía que haber tocado en la Universidad de Ingeniería, en la Teletón y en Chosica, respectivamente; pero su corazón no llegó. Y, por consiguiente, el grupo tampoco.
Dos años más tarde, en 1992, mientras colaboraba en el semanario Telecolor, le hicimos un breve recuerdo. Hoy, a diecienueve años de su partida, lo volvemos a hacer. Con el mismo cariño con el que una tarde, junto a amigos como Johnny López, Sonia Freundt, Reynaldo Aragón y "Wolfie", y al lado de artistas como Rio, Frágil, Nina Mutal y Miki González, le dimos el último adiós en el mismo Tarot Pub, en el distrito limeño de Miraflores, no muy lejos desde donde solo seis años antes, Dudó había dado el primer importante paso de su carrera.
Al año siguiente, el tributo sería mayor. Fue cuando se empezó a celebrar El día del rock nacional.
Descansa en paz amigo rockero.
Javier Lishner Santa Clara, California 30 de noviembre de 2009
A esta hora del día, el presidente Alan García ya se reunió con el papa Benedicto XVI y con su brazo derecho, el Secretario del Estado Vaticano, cardenal Tarcisio Bertone. Desde la capital italiana, el mandatario peruano señaló que habló muy someramente con el Sumo Pontífice sobre la relación con Chile. Afirmó, además, que el Papa le expresó su deseo de ir al Perú, que es lo que le dice a todos los que lo visitan.
Sobre la discrepancia con Chile respecto a la adquisición de armamento en la región, García dijo que el Santo Padre respaldó el concepto general de limitación de gastos en armas. Gran novedad. Eso más parece promoción para el pacífico estado Vaticano. "Su santidad es una persona que está informadísima en el tema de los continentes y en el tema sudamericano lo tiene muy claro", dijo sorprendidísimo el presidente de la República a Radioprogramas del Perú. García todavía no sabe que el papa es como los artistas, que tiene show todos los días. Y una hora antes de salir al escenario se aprende de memoria un par de cosas importantes para quedar bien con su público. Porque los que hacen todo, son los de atrás.
Según García, el Sumo Pontífice y Bertone, le dijeron que ven al Perú como un país muy ejemplar debido a su crecimiento económico y a su erradicación de la pobreza. Que eso y todo lo demás, se lo crea otro. Ahora, que tome su avión y que vaya a trabajar.
Javier Lishner Santa Clara, California 30 de noviembre de 2009
La noticia dice que Alan García llegó a Roma para audiencia con el papa Benedicto XVI. El presidente peruano será recibido mañana por el Sumo Pontífice para luego sostener una reunión de trabajo con el secretario de Estado del Vaticano, cardenal Tarcisio Bertone. Me pregunto que podrían tratar Alan García y el septuagenario monseñor, que sea de interés nacional.
A primera hora del lunes, García sostendrá una reunión privada con el papa Benedicto XVI. El presidente fue elegido por el pueblo para que lo gobierne y lo represente transparentemente. El presidente peruano no viaja con su dinero y toda reunión debería ser clara. Qué es eso de reuniones privadas. A modo que le esté llevando el dinero que le corresponde al Vaticano por ese infame Concordato firmado, entre gallos y medianoche, entre la Santa Sede y el Estado peruano en 1980.
García Pérez arribó al aeropuerto Leonardo da Vinci-Fiumicino acompañado del ministro de Relaciones Exteriores, José Antonio García Belaunde, y el de Defensa, Rafael Rey Rey. ¿Cuál es el papel del ministro de defensa peruano en el Vaticano? Porque se entiende que esa pueda ser labor de un diplomático como García Belaunde, pero, ¿el ministro de defensa? o será que el pastor alemán nos va a apoyar en el diferendo con Chile. Pero si la mandataria sureña pasó hoy por allí. Y dijo que "Chile es un país que siempre ha priorizado el diálogo, la paz y los mecanismos pacíficos de resolver cualquier tipo de situación con países vecinos u otros". Por eso en su escudo nacional dice "Por la razón o la fuerza".
Tras la visita a Su Santidad, el presidente peruano volará hacia Portugal para asistir a la décimonovena Cumbre Iberoamericana a realizarse en la bella ciudad de Estoril. Aprovechen y vayan a la playa. Y si les alcanza el tiempo, visiten el casino. Bendiciones.
Javier Lishner Santa Clara, California 29 de noviembre de 2009
El 22 de julio del año pasado, publicamos esta breve nota sobre John Mayall a raíz de cumplirse un aniversario más del lanzamiento de su primer disco con Eric Clapton, quien acababa de dejar a los Yardbirds. Hoy, con motivo de su cumpleaños, la volvemos a poner en blanco y negro. Felices 73, Mr. Mayall.
Bluesbreakers: John Mayall with Eric Clapton, apareció en disco el 22 de julio de 1966. De eso, ya hace buen tiempo. Al igual que en la vida de Long John Baldry, en la incipiente historia de John Mayall se cruza el mismo nombre: Alexis Korner. Blues Incorporated, el grupo de Korner, fue la inspiración para que el joven Mayall hiciera su movida a la capital inglesa y formara los Bluesbreakers. Mayall tenía casi 30 años de edad.
Dice su biografía que John Mayall nació el 29 de noviembre de 1933 en Macclesfield, una pequeña villa cercana a Manchester. Fue el mayor de tres hermanos, y creció escuchando la colección de discos de jazz del padre, un aficionado guitarrista, a la sombra de la segunda guerra mundial. A los 13, luego de oír a Lead Belly, Albert Ammons y Pinetop Smith -y con la ayuda de los instrumentos de los vecinos- comenzó su autodidacta carrera. Años más tarde ingresaría al Manchester College of Art, de donde saldría graduado.
Pero no fue hasta la llegada de Eric Clatpon, el joven guitarrista que había dejado a los Yardbirds para dedicarse al blues, que John Mayall graba su primer disco. Era 1966. Clapton diría años más tarde: "En realidad, John Mayall, lo que dirigió fue una escuela para músicos". Se refería a los Bluesbreakers de donde salieron John McVie (Fleetwood Mac), Jack Bruce (Cream), Peter Green (Fleetwood Mac), Aynsley Dunbar, Harvey Mandel, Andy Fraser (Free), Mick Fleetwood (Fleetwood Mac), Mick Taylor (Rolling Stones), Keef Hartley, y Jon Hiseman (Colosseum), entre otros.
Con el lanzamiento de The Turning Point en 1969, una pieza acústica grabada en el Fillmore East, y con un éxito en las listas ("Room To Move"), Mayall decide mudarse a Laurel Canyon, en el área de Los Angeles. Desde allí, acogería a músicos como Blue Mitchell, Red Holloway, Larry Taylor y Harvey Mandel. Además, estaría más cerca del blues de John Lee Hooker, Albert King, Buddy Guy y Junior Wells.
Un poco de blues con John Mayall.
La carrera de Mayall ha sido vasta. Durante los setenta, por ejemplo, lanzó casi una veintena de discos entre los que estuvieron, Empty Rooms (1970), Back to the Roots (1971), New Year, New Band, New Company (1975), Banquet in Blues (1976) y Bottom Line (1979).
A excepción de la tragedia sucedida en 1979 cuando, en Laurel Canyon, su residencia ardió en fuego llevándose importantes pertenencias; la vida de John Mayall continuó apacible pero ocupada, entre escenarios, estudios de grabación, discos, y su familia. En 1982, con la ayuda de Mick Taylor, John McVie y Colin Allen, revivió a los Bluesbreakers para una gira mundial. Esta le sirvió como vitrina para captar a una nueva generación de seguidores.
El nuevo milenio lo encuentra publicando su quincuagésimo primer disco: John Mayall And Friends – Along For The Ride. En él participan, entre otros, Billy Gibbons (ZZ Top), Jonny Lang, Steve Miller, Steve Cropper, Otis Rush, Gary Moore, Jeff Healey y hasta el gran Billy Preston, con quien hace un inolvidable dueto.
Bluesbreakers: John Mayall con Eric Clapton.
En 2003, al cumplir setenta años, organiza un concierto a beneficio de la UNICEF, el que comparte con Eric Clapton, Mick Taylor y Chris Barber; todos, ex miembros de los Bluesbreakers.
Dos años después, en 2005, John Mayall fue declarado Oficial de la Orden del Imperio Británico. A su lado estuvieron Jimmy Page y Brian May. En la actualidad, a sus 74, como dice su página de Internet, no tiene intenciones de abandonar la música.
Para escuchar a John Mayall con Eric Clapton en "Hideaway", presione aquí. Para escuchar "Evil Woman" con Peter Green, presione acá.
Javier Lishner Santa Clara, California 22 de julio de 2008
Hoy, el diario La República de Lima informa que empresa chilena podría confeccionar DNIs. El DNI es el Documento Nacional de Identificación, ese pedazo de cartón enmicado que los peruanos utilizamos para hacer saber quiénes somos, cuándo nacimos y dónde vivimos. Lo insólito de esto es que podría ser una empresa extranjera la que obtendría la buena pro de imprimir los DNIs. Y eso, sin exagerar, sería inaudito. Que una empresa, especialmente, chilena, sea la que juegue con los datos de nosotros los peruanos. O sea, no satisfecho el gobierno de Alan García con haberle dado entrada a los vecinos del sur, en todos los campos; ahora, permitiría que hasta los datos personales sean ventilados a extranjeros.
De acuerdo a La República, porque los demás diarios como ya se ha hecho costumbre, prefieren informar sobre Jaime Bayly o Laura Bozzo, una empresa peruana y un consorcio colombo-chileno se disputan la buena pro para la impresión de los documentos de identificación de los peruanos. Originalmente, en febrero último, la empresa peruana Formas Continuas y Derivados S.A. (Focodesa) había ganado la licitación convocada por el Registro Nacional de Identificación y Estado Civil (Reniec). Luego de una apelación, el Tribunal de Contrataciones del Estado decidió descalificar a la peruana Focodesa y otorgar la buena pro al consorcio colombo-chileno Tomas Greg & Sons del Perú-Enotria S.A.
Tras un intríngulis, en el que se incluyó al Poder Judicial, la entidad pública volvió a realizar una nueva convocatoria. Fue así que, el 23 de octubre, se reafirmó como ganador al consorcio internacional. No obstante, dice el diario peruano, que, tres días después, el Reniec resolvió declarar nula la calificación y la adjudicación de la buena pro. Entonces, encargó a la Sub Jefatura Nacional investigar el concurso.
OJO CON ESTO Frente a la decisión de Reniec, Thomas Greg-Enotria apeló nuevamente ante Consucode para defender su adjudicación. Este hecho dio lugar a que se le restituya su condición de ganador de la licitación para imprimir los DNI de civiles, militares y policías peruanos. De civiles, militares y policías peruanos.
Cuando los funcionarios de Reniec fueron consultados sobre el hecho de que sea una empresa con capitales chilenos la que se encargue de preparar el documento de identidad nacional, estos señores manifestaron a través de su oficina de prensa que no había limitaciones legales ni constitucionales para contratar con empresas extranjeras, sea chilena o de otra nacionalidad.
"Estamos inmersos en una economía de libre mercado y se puede contratar a empresas con capitales de donde sea", puntualizó Benito Portocarrero, su vocero de prensa. Imagino que con tal de recibir su salario, este señor es capaz de decir cualquier cosa. O sea, lo que digan sus jefes. O sea, no es la persona indicada para tomarle declaraciones.
En cuanto al complicado proceso de licitación que impide contar con el proveedor del DNI, Portocarrero señaló que Reniec espera que Consucode designe al ganador de la licitación a breve plazo para poder realizar el contrato definitivo. "Todavía no tenemos al ganador, entonces no hay que adelantar juicios en el sentido de que la empresa que imprimirá el DNI será chilena", añadió. Sí, Portocarrero, me voy a quedar callado porque tú me lo dices.
Thomas Greg & Sons del Perú S.A. es una empresa transnacional de capitales colombianos. Mientras que Enotria S.A. tiene 48 por ciento de accionariado peruano y 52 por ciento de capitales chilenos. Ambas empresas que conforman el consorcio disponen del 50 por ciento de participación. En tanto que, Focodesa, que se dedica a imprimir documentos de identidad y seguridad, es una empresa de capitales peruanos con 50 años de actividad.
La licitación, que desde ya es complicada, debe definirse en cualquier momento. Lo que no está bien es que los datos de nosotros los peruanos, seamos civiles, militares o policías, sean ventilados a empresas extranjeras. Sean éstas de Chile o de Marte. Me parece una barbaridad. Y después se quejan de los espías.
Javier Lishner Santa Clara, California 28 de noviembre de 2009
SAGA
El pasado 12 de noviembre, Saga, la banda canadiense de rock progresivo, cuyo paso en el medio radial peruano fue un poco fugaz, estuvo en Caracas, tocando en el anfiteatro del Centro Comercial Sambil. Con su actuación, se inició en la capital venezolana, la primera versión del Festival Rock of the 80's. En el Perú los conocimos a través de su música en 1982, cuando el grupo ya tenía más de un lustro andando por los caminos del rock. "On the Loose", fue el título con el que arribaron a algunas emisoras limeñas.
En aquellos días formaban la banda Jim Crichton en el bajo, Michael Sadler en la voz, Ian Crichton en guitarra, Jim "Daryl" Gilmour en teclados, y Steve Negus en batería. El primer disco de Saga fue publicado en 1978. Pero sería recién con el cuarto, Worlds Apart, con el que tendrían presencia en las listas internacionales; principalmente en los Estados Unidos. En Europa, países como Dinamarca y Alemania, le prestaron especial interés. Con una propuesta fuerte aunque sin dejar del todo al pop, pasaron sus quince minutos de fama. En Estados Unidos y en algunos países de Latinoamérica, el que en otros países fuera el primer simple del disco en cuestión, se convirtió en el siguiente éxito. Se tituló "Wind Him Up".
Desde aquel lejano 1982 ha pasado mucha agua bajo el río. Y también varios cambios en su formación. Pero escuchar estos temas que marcaron una época, nos devuelve a esa década donde hubo gran variedad de música. Y bandas como Saga, Asia, Styx o Rush, no solo compartían un nombre propio de cuatro letras, sino también puestos en algunas listas alrededor del mundo. Saga, por lo menos, estuvo en las del Perú.
El grupo, con su nuevo cantante de nombre Rob Moratti (caserito de YouTube), acaba de publicar su vigésima placa, sin contar discos en vivo ni recopliaciones. Lo han llamado The Human Condition. Acompañan a Moratti en la actual formación, los conocidos Jim Crichton, Ian Crichton y Jim Gilmour, además de Brian Doerner en batería. El nuevo disco los está llevando a recorrer el territorio de su país y, en 2010, los llevará por varias ciudades de Europa.
Javier Lishner Santa Clara, California 28 de noviembre de 2009
Friday, November 27, 2009
LOS CORI, WOODMAN Y LOS LAURELES
Qué hace el señor Arturo Woodman todavía como presidente del Instituto Peruano del Deporte. Si todo lo que ha hecho parece haber sido decir barbaridades una y otra vez. En esta oportunidad, el dirigente deportivo aparece declarando que a los hermanos Deysi y Jorge Cori, quienes acaban de obtener los respectivos campeonatos mundiales de ajedrez en las categorías sub 16 y sub 14, no les corresponde los Laureles Deportivos.
En Radioprogramas del Perú, el señor Woodman declaró que, "Lamentablemente no les correspondería porque la ley habla claramente en el sentido que tienen que ser campeones mundiales en la más alta categoría o campeones olímpicos".
Eso es justamente lo que varios le dijimos hace tan solo tres meses cuando a costa de no sé qué, se le entregaron los imponentes laureles al jinete Édgar Prado. ¿No es que la ley es igual para todos? ¿Ha ganado el señor Prado algún campeonato mundial u olímpico? ¿Es si quiera la hípica -la actividad del señor Prado- un deporte en el Perú? Al menos, el ajedrez sí lo es.
Como para rematarla, porque locos hay de remate, el señor agrega: "Tal como está, es difícil darlos. Eso no quita que ellos hayan obtenido un triunfo extraordinario, pero una cosa es el triunfo y otra la ley". ¿De qué ley habla este señor? ¿De la que se sentaron en septiembre cuando en el Jockey Club del Perú, el vice-presidente Luis Giampietri; el presidente del Jockey, Carlos Roe Battistini; un señor de apellido Guizado y él, participaron de esa patraña? O en la otra, cuando un año antes le entregaron los Laureles Deportivos al tenista Luis Horna, quien, durante su larga carrera (que ya termina), nunca ganó un campeonato mundial ni olímpico. Porque si de seguir la ley se trata, el Roland Garros no es un campeonato mundial de tenis sino un torneo internacional. La mejor ubicación que logró durante su exitosa trayectoria el tenista peruano fue el puesto 33 en el ranking mundial...
Entre tanta barbaridad que ni vale la pena publicar, Woodman dijo que mientras Colombia y Venezuela tienen como presupuesto para el deporte entre 6 y 9 dólares per cápita, el Perú va a tener 2 dólares. Y, de esa cantidad, ¿cuánto le corresponde a usted por su cápita? Sería una muy buena respuesta para escuchar, luego de tanto fracaso. La situación del fútbol y los Juegos Panamericanos, por ejemplo. (FOTO: ANDINA/Víctor Palomino).
Javier Lishner Santa Clara, California 27 de noviembre de 2009
La canción del Up get up bla - bla bla - bla CON OTRA AYUDITA DE MIS AMIGOS
Esta vez recurro a mis amigos lectores que saben de música, de artistas y de videos. Hace un par de días, otro lector nos dejó un mensaje pidiendo ayuda para identificar una canción. El mensaje fue más o menos así:
"Maestro: Ayúdame con esta canción. Te explico, la chica es blanca, tiene pinta de chiquilla, creo que es pelirroja (el video lo vi hace aaaaaaaaaños, a inicios de los 90), tiene brackets, y el coro es algo así... "Up get up bla - bla bla - bla".
Son dos tipos gritando (uno es pelado, creo)... Parece que es hard rock, ella a veces sale en un columpio.... A ver pues si esta me la consigues. Muchas gracias de antemano y que sigan los éxitos.
P.D. Antes me ayudaste con el "chichipa" recuerdas??? de Madleen Kane.
Ojalá que esta vez podamos volver a sacar de la incertidumbre a este amigo que a mediados de año nos dejó otro encargo, el que pudimos cumplir gracias a la ayuda de algunos de ustedes. ¿Alguien recuerda "La canción del chi chi pa"?
Javier Lishner Santa Clara, California 27 de noviembre de 2009
THANKSGIVING: Gratitud y comilona
Celebrado principalmente en los Estados Unidos y Canadá, el Thanksgiving o día de Acción de Gracias, como se le conoce en nuestro idioma, es un día de agradecimiento. Es el momento en que los pobladores expresan gratitud especialmente por la cosecha. Por consiguiente, la comida se convierte en el centro de atención de la festividad. El pavo, tan tradicional en algunos de nuestros pueblos latinoamericanos durante la navidad, es, de todos, el más popular. Es el símbolo de la celebración. Aunque el pastel de calabaza, el famoso pumpkin pie, le sigue los pasos de cerca y es casi infaltable en la mesa de cada hogar. Luego siguen los vegetales, las frutas, los diversos tipos de pan, las semillas, etc. Los orígenes del Thanksgiving datan del siglo 17.
Como es de esperarse, el día es feriado. En Estados Unidos se elige siempre el cuarto jueves de noviembre (en Canadá es el segundo lunes de octubre), y, de paso, se toma el día siguiente como puente para seguir comiendo y festejando juntos. Las familias, que por lo general viven separadas en diferentes ciudades de la nación, aprovechan la celebración para reunirse en casa de los progenitores. Y muchos millones viajan. Pero hay un detalle más, que, en nuestra sociedad tan cristiana, es casi infaltable: el comercio.
El viernes, cuando aún estamos con la panza llena, y desde muy temprano en la mañana, se inicia el Black Friday. Eso no es más que el día del año en que las grandes tiendas de almacén aprovechan el pánico y venden sus artefactos a precios inimaginables. Por ejemplo, una laptop Hewlett Packard con memoria de 3GB y pantalla de 15.6 pulgadas puede costar $150.00. El precio normal -al menos por estos lares de California- es bastante más que eso. Solo que aquí existe otro detalle. Para poder conseguir la mercadería a ese precio de oferta hay que levantarse antes de que abran las tiendas. Y ello, por lo general, sucede a las 5 de la mañana. Aquel que se apareciera más tarde, podría solo ver los estantes vacíos.
Feliz día de Acción de Gracias a quienes viven en los Estados Unidos; con gratitud, prosperidad y mucha comida.
Javier Lishner Santa Clara, California 26 de noviembre de 2009
Monday, November 23, 2009
LUCHO ARGÜELLES: Voz de su generación
Había estado en la cabina de grabaciones con el señor Zavala, con quien unos días antes había realizado un par de pilotos, esas conocidas pruebas que hacemos quienes trabajamos en radio para mostrar y demostrar nuestras aptitudes. Entonces subí a las oficinas pero, en el camino, exactamente en el área de recepción, una conocida voz interrumpió mi paso firme. Yo, que conocía al personaje de lejos aunque nunca había cruzado palabra con él, le respondí tímidamente. Era Lucho Argüelles quien, en frente de Elvira Gálvez -la recordada secretaria de la gerencia general-, me preguntó si yo era el nuevo discjockey de la radio. Acto seguido, se presentó. Lo vi serio, profesional y su trato fue amigable. Fue el comienzo de una entrañable amistad.
Fresas con Crema en la playa.
De aquel momento, en los viejos estudios de Radio Panamericana de Lima, ha pasado poco más de un cuarto de siglo. Un par de meses después del encuentro, Walter Gonzales, gerente de programación, dejaba la empresa y yo asumía el matutino programa Buenos días, día; además de un cargo en el departamento de programación al lado de César Abril. Con Lucho, como parte de La Más Más, pudimos recorrer muchas ciudades del interior. Recuerdo un viaje a Arequipa en el que, cuando salimos a dar una vuelta nocturna -justamente con César y Johnny López- un grupo de bandidos, sin ninguna razón aparente, nos buscó pleito. Y Lucho se quiso pelear. Otra en Ica, en el verano del 84, cuando se tiró a la piscina desde la ventana de su habitación (cosa que ni Charly García aún había hecho). Recién lo iba conociendo y empezaba a darme cuenta de que estaba al lado de otro de los grandes discjockeys que, alguna vez, había escuchado en mi pequeño radio a transistores cuando recién comenzaba a prestarle atención a la música.
Nos comunicamos luego de varios años y mi sentido de percepción me dice que nuestra amistad sigue intacta. Allí donde la dejamos cuando ambos empezamos a labrar nuestros propios caminos, luego de haber compartido labores. Una vez se lo dije y es hora de ratificarlo. A través de los años fui afortunado de conocer a muchos profesionales y experimentados comunicadores peruanos. De todos aprendí, pero hubo algunos que compartieron sus conocimientos. Y Lucho Argüelles fue uno de ellos. A continuación les presento el breve encuentro virtual con Lucho, quien por estos días anda muy ocupado con el proyecto de la Feria de Lima.
Con Miguel Bosé y Javier Lishner. 1984.
- Hola Lucho, mucha gente te identifica con tu paso por Radio Panamericana en la segunda mitad de los años setenta. ¿Cuándo fue tu debut oficial en la radio de Mariano Carranza? - En Radio Panamericana, oficialmente en el año 1976.
- Cuéntanos, ¿qué te llevó a hacer radio a tan temprana edad? Porque que yo recuerde eras todavía un colegial cuando te iniciaste. Al menos, eso decían en la radio... - Sí, Javier. Yo me inicio en Radio San Isidro en el año 69, con un programa llamado Prepárense, y el tema característico del programa era "Get Ready" de Rare Earth.... Yo tenia 14 años y aún estaba en el colegio. - A través de los años te identificaste como uno de los conocedores del rock y de otras vertientes musicales; el jazz, por ejemplo. Si creciste en el Perú en una época de gobierno militar antiamericano donde no se promovían géneros como el rock y el jazz, ni llegaba material impreso ni discográfico de afuera, ¿cómo te fuiste nutriendo de esa información? - Tenía buenos contactos como Gerardo Manuel que manejaba la Discos El Virrey, y a allí llegaba una infinidad de material, sobre todo de jazz. Era música que no salía a la venta. Luego, también, a través de grandes amigos, todos muy conocedores de música, como el italiano Marcelo Simonti, Enrique Alzamora, Sihuar Barrio, Helard Murillo...
- ¿Qué podrías decir de Gerardo Manuel? - Mi maestro y gran amigo. - Tu pase de Radio Miraflores -donde te hiciste de un nombre- a Radio Panamericana en 1976 fue una de esas sorpresas de la época. Llegaste joven pero con mucha experiencia. Luego de tantos años, ¿crees que tu presencia en Radio Panamericana fue vital para el inicio de la nueva etapa de la emisora? - Sinceramente creo que sí, ya que yo regresaba de Estados Unidos con Billboard y otros elementos.
En frente del Hard Rock Café de Hollywood, Florida.
- ¿Qué canciones recuerdas de tus primeros días en Panamericana? Sé que me dirás que las de Peter Frampton. ¿Algunas otras?
- A mi regreso de Estados Unidos traje mucha música e incluso estuve en el Orange Bowl y vi a Peter Frampton. Recuerdo que traje "If You Leave Me Now" de Chicago, "The Royal Scam" de Steely Dan, el álbum When the Eagle Flies de Traffic, entre otros.
- Hasta hoy parece que existe la incógnita de quién fue la persona que creó la denominación de "La Más Más" para elegir a las mejores canciones del año en Radio Panamericana. ¿Recuerdas algo? ¿Cómo fueron los inicios de La Más Más? - El concepto fue mío y de dos amigos, Alex Dañino y Joshe Eguiguren, con quienes planeamos el primer concierto en la Concha Acústica del Parque Salazar de Miraflores, el cual llevó a gran cantidad de gente. Luego, con la señora Raquel Delgado de Alcántara, César Abril y Walter Gonzales, se siguió con esta iniciativa y se hizo La Más Más.
- Una vez me contaste que en Radio Panamericana todos los discjockeys se reunían semanalmente para planificar las nuevas estrategias de programación y la música que se debía tocar. Recuerdas, por ejemplo, ¿quiénes eran los que más participaban? - Walter, Albertín [Ríos], Humberto Velásquez, Kike Chávez y el buen César Abril. - ¿Cuál es tu opinión sobre Iván Márquez? Porque trabajaste con él durante muchos años, ¿verdad? - Otro maestro en la locución, romántico y muy buen amigo. - Humberto Velásquez fue discjockey pionero en el Perú. ¿Cuál es tu opinión sobre Humberto? - Respeto por su trayectoria.
Truco fotográfico de Tater Oliva con Fernando Ubiergo. 1984.
- Así como alguna vez tú dejaste Radio Miraflores por Panamericana, años después lo haría Johnny López. Yo recuerdo la despedida que le hicimos a Johnny en el viejo local de Alcanfores. De verdad que su alejamiento nos dejó sin parte importante de nuestro elenco. Pero comenzaba a ser la figura de la televisión y tenía que seguir volando. ¿Cómo tomaste la llegada de Johnny a Mariano Carranza 126? - Fuimos Gustavo Delgado y yo los que hablamos con la señora Raquel para traerlo... Luego me arrepentí. ¡No mentira!
- Jajajajaja... ¿Crees que la llegada de Johnny a Panamericana te quitó protagonismo? - Para nada. Yo estaba en radio para dar mi música a los oyentes y no pensaba ni ser presentador ni maestro de ceremonias, cosa que si eran metas de Johnny. - Muy cierto. Qué buena respuesta, Lucho. A propósito, mañana es cumpleaños de Johnny... Hablar de Fresas con Crema es hablar de parte importante de los programas musicales de la radio juvenil en el Perú. Tu espacio fue puntal tanto en Miraflores como en Panamericana. ¿Cómo nació Fresas con Crema? ¿De quién fue la idea de tan original nombre? - En España había un programa muy famoso que se llamaba Nata y Fresas. Mi gran amigo Eduardo Olivares Valdivia recién llegado de Sevilla -donde estudió medicina- me dio pautas y le pusimos Fresas con Crema, "rica música, muy dulce para las chicas".
- Creo que poco más de un año después del arribo de Johnny a Panamericana, llegué yo. Y también de Miraflores. Recuerdo que el día de mi bienvenida la señora Raquel me dijo: "De allá ya llegaron Lucho y Johnny, y tú serás el último. No quiero que la gente piense que nosotros no podemos crear nuestras propias estrellas". Fue la primera vez que me llamaron estrella, y creo que por culpa de ustedes... jaja. Debo reconocer que desde el primer día me trataste muy bien. Se te veía serio. - Cómo, por favor. Yo ya sabía de tu trayectoria y creo que yo me acercaba en gustos musicales más a tí por lo del rock europeo.
- Bueno, después de Lucho, Johnny y Javier, de Radio Miraflores también llegó Sammy Sadovnik. Y la profecía no se cumplió. - Qué te puedo decir...
- ¿Qué recuerdas del nacimiento de Radio Studio 92 en 1983? Porque esa emisora se convirtió muy rápidamente en nuestra competencia, la de Panamericana. - No escuchaba esa radio. Y si hizo temblar a Panamericana fue porque usaba el mismo formato y porque tuvo una muy buena inversión en su marketing.
- Una de las cosas que siempre admiré de tí fue tu capacidad para desenvolverte en diferentes campos. Hiciste televisión, mucha locución comercial, producciones, programas musicales, de maestro de ceremonias, ventas... y la mayoría de veces en forma simultánea. De todas tus labores en los medios, ¿cuál fue la que más te motivó? - Todas, cada una en su respectivo momento. Amo las comunicaciones.
- Me imagino que también tenemos eso en común... Fuiste y sigues siendo una de las voces más destacadas de tu generación. ¿Algunos nombres que recuerdes que influyeron en tus inicios? - Adolfo Sobenes, Lucho Nevares (ex Traffic Sound), Gerardo, Richie Zellon, entre otros más. - ¿Qué puedes decir de Adolfo Sobenes, el recordado hombre de Radio Miraflores?- La mejor voz que hubo en radio.- Creo que llegaste a trabajar con Diana García, ¿qué es lo que más recuerdas de Diana? - Su encanto, su dulzura... una gran profesional.
- Alguien que muchas veces hablaba de tí, incluso antes de que yo te conociera, era Nelly Mendívil Castro. Y siempre lo hacía con mucho cariño. Creo que se sentía orgullosa que te hubieras formado en su escuela, la de Radio Miraflores... - Gran maestra, muy buena amiga.
- Ojo que Nelly hablaba de tí con orgullo pero también comentaba que eras una bala. Algo así como incontrolable. No sé porqué lo diría... - Sí, y a mucho orgullo.
- Jajaja... Volviendo a La Más Más, ¿recuerdas especialmente alguna gira al interior? - Todas. Cada una tenía un feeling diferente.
El segundo de los parados, con los compañeros de la radio en las Bodas de Plata de Panamericana Televisión de Lima. 1984.
- Es muy cierto... ¿Recuerdas cuando casi nos trompeamos en Arequipa una noche que salimos a dar una vuelta con César y Johnny? - Fue en un restaurante de la Plaza de Armas. A las chicas les gustaba la llegada de sus discjockeys favoritos y por ahí un enamorado celoso, con sus patas, nos buscó la bronca y se encontraron con una pared, ya que nosotros también teníamos calle. En todas partes hay gente faltosa. En fin.
- ¿Y la vez que se bajaron una puerta en el coliseo de Chiclayo? - Era la histeria que causaba La Más Más. Ese día, por no poder ingresar a falta de boletos, a Gustavo [Delgado] le cayó una piedra en la frente que le dejó una marca.
- Claro que lo recuerdo. Parece que hubiera sido ayer cuando sucedió. Afortunadamente allí mismo estaba el doctor Carlos Alcántara quien lo atendió. Pero Gustavo tuvo que andar con el parchecito por unos días más y con la marca por un buen tiempo... ¿Qué es lo primero que se te viene a la mente cuando recuerdas las giras? - Las chicas. - ¿Recuerdas especialmente alguna Más Más en Lima? Tal vez la primera o la de la década del setenta... No sé. - Todas eran diferentes y cada una tenía su onda.
- ¿Y a alguna chica en especial? O todas tenían su onda? - Cada una en su momento.
- Te creo. En una entrevista que Miguel Villamizar le hizo a Susana Alcántara este año, Susana dijo que la Plaza de Acho y el Coliseo Amauta tuvieron su encanto. Afirmó que sería muy difícil elegir uno porque guarda muy gratos recuerdos de ambos. ¿En cuál de los dos escenarios te sentías más cómodo? - En el Amauta y la Concha Acústica del Campo de Marte. En la Plaza de Toros no tanto. Había mucha tierra y olía a toro muerto.
Welcome to the Jungle. En la azotea de Panamericana con Johnny, JL, Sammy y Pete Lovell de Picture.
- A propósito, muchas veces en La Más Más hiciste dueto con Susana para la presentación de los temas. ¿Qué nos puedes decir de ella, su trabajo en Las 30 Más, su presencia como la voz femenina de la radio juvenil... cuando no habían muchas. - Era lo máximo. Es una chica encantadora, gran amiga y súper buena onda. - Si te pidieran que dieras las tres canciones más importantes del siglo 20, ¿cuáles escogerías? - No tengo canciones, tengo grupos. Por ejemplo, Yes, Led Zeppelin, The Who, Jethro Tull, Emerson Lake & Palmer, Chicago... Vangelis. - ¿A qué se dedica Lucho Argüelles actualmente? - Empresario en construcción, realización de eventos y todo los negocios que se me presenten. Tengo mucha experiencia en todo eso.
- ¿Qué hubo de la Feria de Lima? ¿Está cumpliendo con sus objetivos? En lo personal, ¿cómo te está yendo con ese proyecto? - Estamos trabajando en eso. Ese es un nicho que dejó la Feria del Hogar. Planeamos hacer cinco ferias anuales.
- Luego de la Feria de Lima, ¿qué viene en la carrera de Lucho Argüelles? - El contrato con el Monumental por tres años.
- ¿Qué significa eso? - Seguir con el proyecto y, en el camino, como tú sabes, salen otras cosas. Yo voy a estar entre el Perú y USA con los negocios de Caro y los míos. Voy a seguir trayendo cosas novedosas y viendo también la posibilidad de contratar grupos que desfilan por el Hard Rock de Hollywood, Florida.
- Ahora que andas retirado temporalmente de la radio, ¿cuál crees que podría ser tu mejor consejo como discjockey? - Que los deejays no toquen música hasta quemarla.
- ¿Tendremos alguna vez a Lucho Argüelles de vuelta en las cabinas? Si fuera así, ¿te provocaría hacer Fresas con Crema? - Claro que sí, pero producida contigo. Creo que deberíamos hacer un nuevo experimento radial desde los Estados Unidos.
- Gracias por lo que me corresponde. Si fuera desde aquí se llamaría Banana Split... En este blog han sido varias las veces que lectores han recordado Un Hueco en el Espacio, un programa que produjiste en Radio Panamericana. ¿Qué características tenía? - Era música más compleja, diferente.
En Radio El Sur de Cuzco con Sammy Sadovnik, JL y Jorge Muñiz. 1986.
- No podría terminar sin preguntarte por La Hora del Sunset. Creo que ese espacio era como ver a Lucho Argüelles en su máximo esplendor... Seis de la tarde, caída del sol, sabor a playa, temas como el "Summer Madness" de Kool & the Gang. - Sí, amo el verano, las olas, la playa y por supuesto que cerrar el día con mi música era un placer casi sexual.
- Por favor, lo primero que se te ocurra con las siguientes palabras: - Radio. Mi pasión - Televisión. Genial, lamentablemente mal manejada actualmente en Perú. Muy saturada publicitariamente porque la gente de ventas ahora no tienen hue.... para subir tarifas. - Corrida de toros. Asquerosa. - Micrófono. Complemento para llegar a la gente. - Voz. Importante pero no necesaria. - Un artista. Una ilusión de llegar a su objetivo. - Un grupo. Unión de talentos. - John Lennon. Un soñador confundido pero genio. - Michael Jackson. Muy bueno, lástima que sus vínculos familiares le crearon todos sus traumas. - David Bowie. Genio, estilo, innovador en lo suyo. - Política. Conveniencia de unos para vivir de otros. - Religión. Punto de equilibrio entre lo bueno y lo malo. Jesús, lo máximo. - Una frase. El más elevado entre los hombres es el que sabe elevarse con humildad. - Un político. Prefiero un gerente no un comechado. Si funciona queda si no se va. - Educación. Importante en la vida y vital en estos tiempos. - Uña de gato. No sé. - Buchame al ajo. Muy rico, pero no de delfín. - Los delfines. Maravilla de la naturaleza. - Máncora. Amo el mar. Lo máximo. - Un álbum. Days of Future Passed. - Una entrevista. Trabajo de sapos. - Charly García. Está mejorando, buen músico. - Alan García. Muy inteligente, gran orador. - Benedicto XVI. Juan Pablo II. - Cuzco. Un hueco en el espacio. - La Huacachina. Muy bonito. - Rock and roll. Hijo del jazz. - Jazz. Padre del rock. - Satchmo. Jazz lo máximo. - Lima. De mis amores y tristezas, mucha gente. - El Perú. Bendición del Creador.
Entrebambalinas en La Más Más del Verano 85 en la Plaza de Acho.
- Gracias Lucho por la entrevista. Me hubiera gustado hablar mucho más contigo. Sobre Steely Dan, los Crusaders, Spandau Ballet, The English Beat, el concierto de Peter Frampton, el jazz, tu trabajo de locutor en la televisión y tantas cosas más, pero comprendo que tienes que seguir con tus labores. Finalmente, debo decirte que formando el mismo elenco de Radio Panamericana fuiste siempre un gran apoyo... aunque jodías bastante. Buena suerte en tus proyectos.
- No sabía que eras tan preguntón. No te olvides del proyecto de volver juntos a hacer radio. Un fuerte abrazo, bendiciones hermano mío. - Amén. Javier Lishner Santa Clara, California 23 de noviembre de 2009
Saturday, November 21, 2009
LLENA TU CABEZA DE PISCO
Como mencionamos hace un par de días, la frustración es sinónimo de chasco, fiasco, desengaño. Todo lo opuesto a ilusión, aquello con lo que entre más joven se es, con mayores ganas se anhela. Eso fue precisamente lo que nos sucedió en enero de 1981 cuando intentamos entrevistar a Mick Jagger. No obstante, por nuestro empuje y juventud, no nos dimos por vencidos. Como se dice, teníamos que sacarnos el clavo... algún día.
Tuvieron que pasar más de ocho años para que esa ilusión de entrevistar a la estrella volviera a brotar en nosotros. Se acercaba la última década del siglo 20 y, los Rolling Stones, también luego de varios años, anunciaban una nueva gira. La iban a llamar Steel Wheels, y era su regreso triunfal con los mismos integrantes que se habían despedido una noche de julio de 1982 en el Roundhay Park de Leeds, en Inglaterra.
Mientras en alguna parte del mundo, Mick Jagger, Keith Richards, Bill Wyman, Ronnie Wood y Charlie Watts, se preparaban para su segundo debut, paradójicamente, en el Veterans Stadium de Philadelphia; en Lima, algunos hacíamos preparativos para viajar donde fuera con tal de no perdernos una actuación de la banda más grande del mundo.
Como quiera que andábamos trabajando en la televisión, y no por coincidencia en un programa de música -donde transmitíamos videos y entrevistas-, las gestiones para capitalizar la idea no fueron del todo ajenas. El primer paso fue dado por la empresa telecomunicadora y, el segundo, también: autorizar el viaje y confirmar el lugar del destino. Los Rolling Stones iban a estar en Miami el 15 y 16 de noviembre, y era hasta allí adonde íbamos a llegar.
Entre los papeleos administrativos hubo uno que nos devolvió la esperanza de superar la frustrada entrevista a Jagger en el 81. Y fue cuando se le pidió a la casa discográfica que representaba a los Stones en el Perú, la CBS, que moviera sus tentáculos para ver si existía la posibilidad de una reunión con la banda. Y CBS lo hizo, como consta en el documento que enviaron a sus pares de la Ciudad del Sol, para que nos tuvieran en cuenta en el rol de entrevistas que el grupo iba a brindar en Miami. A Canal 13 de Perú, empresa en la que trabajaba, se le concedió un espacio inmediatamente después de la que iba a tener la brasileñísima Rede Globo. Así, con esa ilusión, viajamos.
Pero, en Lima, antes de subir al avión, mi colega Sonia Freundt -quien conducía acertadamente El Ranking- y quien suscribe -quien conducía Mirando la Radio- tuvimos una brillante idea. Comprar un par de botellas de pisco -la bebida peruana por excelencia- para obsequiarles a los Rolling Stones luego de la entrevista. Y lo hicimos en el duty free del aeropuerto internacional Jorge Chávez. Era noviembre de 1989. Allá nos esperaba gente relacionada a la prensa y amigos que, finalmente, nos tratarían muy bien. Aurora Guzmán, Sarah Bejarano y Luis Alberto Sínchez, entre ellos.
El arribo fue normal. Nuestro foco, puesto en la presentación de la banda y su respectiva entrevista, comenzó a cambiar un poco en la medida que empezaron las invitaciones y compromisos. Un festival peruano en donde se reunían don Óscar Avilés y Arturo "Zambo" Cavero, el show de Debbie Gibson en el Miami Arena, Bob Dylan en Sunrise, el Festival OTI que ganaría México el siguiente fin de semana, etc. Y, en medio de ese ambiente de fiesta y de compromisos, una noticia que nos volvió a robar la esperanza: "Luego de sus exitosas actuaciones en el Superdome de New Orleans y en el Cotton Bowl de Dallas, los Rolling Stones arribaron a Miami... y acaban de cancelar todo contacto con la prensa". Y los piscos se quedaron esperando hasta esa noche que por ahora, luego de veinte años, prefiero no recordar.
Javier Lishner Santa Clara, California 21 de noviembre de 2009
La frustración es sinónimo de chasco, desengaño, revés. Es lo estrictamente opuesto a ilusión; aquello con lo que entre más joven se es, con más ganas se anhela. Eso fue precisamente lo que nos sucedió en enero de 1981, cuando aún teníamos anhelos y ganas. Era tarde y, como era costumbre, nos encontrábamos en la radio. Seríamos unos cinco o seis empezando el fin de semana en la sala de operaciones de la FM de Radio Miraflores. Que recuerde, entre ellos, estábamos Jorge Henderson, Jorge Muñiz, Sammy Sadovnik y quien suscribe. Entonces alguien llamó por teléfono haciendo saber que Mick Jagger había arribado a Lima y se encontraba hospedado en el hotel Country Club de San Isidro. Nos miramos las caras.
Yo, que conocía un poco de la trayectoria de la banda, no lo creí. Si bien es cierto que Jagger se encontraba en el Perú participando en el rodaje de Fizcarraldo en Iquitos, las llamadas que recibíamos en la radio no siempre eran del todo confiables. Y muchas que parecían, resultaban siendo un fiasco. Entonces surgió la pregunta, ¿y quién va a ir? Nadie contestó. Y el que más debió decir que sí, se quedó callado. Fue cuando Jorge Henderson, que, por esos días conducía con éxito un programa llamado Mundo Musical Iberoamericano [que fue la semilla del posterior Enhorabuena] intervino a viva voz: "Si fuera Julio Iglesias, yo ya estaría allí...". Esas fueron las mágicas ocho palabras que prácticamente nos empujaron a tomar nuestras cosas y marcharnos con rumbo a la cuadra 5 de Los Eucaliptos. Les tocó a Sammy Sadovnik y a quien suscribe la tarea de ir en búsqueda de lo desconocido: el líder y vocalista principal de los Rolling Stones.
Nuestro arribo fue casi preciso. Como quiera que antes de llegar a su puerta principal, el hotel tiene una larga entrada rodeada de bien cuidados jardines, nos tocó seguir educadamente el camino. Fue cuando Sammy irrumpió diciendo: "Ese es Mick Jagger". Ese -que iba a escasos metros delante nuestro- iba acompañado de una despampanante mujer y otro flaco más rubio que él. Los tres terminaron pasando por la puerta principal del tradicional hotel. A los pocos segundos nos tocó hacer lo propio a nosotros. Y allí, en el lobby, sucedió el encuentro.
Estrechándoles la mano nos presentamos y fue cuando el rubio intervino. ¿De Radio Miraflores?, preguntó en español. "Sí, trabajamos en Radio Miraflores y nos gustaría hacerle una entrevista a Mick", respondimos con regular intensidad. "Yo soy amigo de Buby Palma", contestó el rubio, mientras Jagger y la modelo miraban la escena. Buby Palma era el director gerente de nuestra emisora. La modelo terminó siendo la hermosa Susy Dyson y, el rubio, Peter Koecklin, hermano de Jorge, el destacado automovilista peruano. De haberlo sabido hubiera tenido tema de conversación. Hacía menos de un mes que -al lado de mis colegas Johnny López, Hugo Salazar y Quique Cano-Alva, y nuestras respectivas parejas- había pasado el año nuevo en la Hacienda Villa con el grupo Change, a quienes Koecklin había llevado de los Estados Unidos. Fue también él quien alguna vez, a principios de la década anterior, llevó a Santana a Lima para presentarlo en el estadio de la Universidad de San Marcos...
Hotel Country Club, lugar del encuentro con Jagger.
Tras unas breves palabras con Mick, el empresario peruano nos invitó a que regresáramos el domingo para la cita con Jagger. Era viernes. Sammy y yo, que no llegábamos ni a los veinte años (Sammy, un par de años menos que yo), nos despedimos y salimos. Sammy se fue a su hogar, que, al igual que el mío, quedaba a un par de cuadras. En tanto, me tocó a mí enrumbar de vuelta a la radio para presentar mi nocturno programa que se iniciaba a las nueve, inmediatamente después de La Hora Pirata de Gerardo Manuel. Aún emocionado, lo comencé con "Emotional Rescue". Pero antes de despedirnos le había comentado a Sammy que intuía que Mick podía irse antes del domingo. Cosas de la inexperiencia. "Seguramente mañana se toma un avión a Los Angeles o Europa y no nos atiende...", le dije. "Mejor volvamos mañana a primera hora". Y, así, convenimos en encontrarnos a las ocho de la mañana del sábado.
A las ocho de la mañana del sábado, nos encontramos en el hotel con cámara de fotos y grabadora en mano. Preguntamos en recepción por la habitación de Mick Jagger y, sin mayor inconveniente, obtuvimos la información. Hay que agregar que el terrorismo aún no era problema (ni para el gobierno de turno y menos para nosotros los jóvenes). En mi mediocre inglés, llamé a la habitación preguntando por Mick. Me contestó el propio cantante. La paradoja fue que mientras yo hacía esfuerzos para que me entendiera que queríamos hacerle la entrevista para Miraflores radio station, Jagger contestó en un clarísimo español: "No quiero". Mientras yo seguía intentando otras formas para que me dijera que "sí", el artista se mantuvo en sus dos claras palabras. Al no tener opción viable, le pasé el fono a Sammy como para mantener viva la esperanza. Pero el popular juvenil disc jockey -ahora narrador deportivo de Telemundo- obtuvo el mismo sonsonete: "No quiero... ¡no quiero!".
Con la grabadora y la cámara de fotos, esperamos un rato en una de las mesas que el hotel, no sé si hasta ahora, tenía en las afueras. Al ver que no pasaba nada, semi decepcionados, nos marchamos. Muy pocos días después, el empresario y amigo de Jagger, llegó a la radio. Como quiera que ya lo había conocido le comenté del asunto. Recuerdo que me dijo algo así: "Yo les dije que fueran el domingo y ustedes fueron el sábado en la mañana cuando Mick acababa de llegar de una fiesta...". En efecto, Mick dio una o dos breves entrevistas aquel domingo (creo que una fue a Radio Doble 9). Como dirían mis amigos mexicanos, "la regamos". Fue culpa de la vehemencia y la poca experiencia.
Con el asesinato de Lennon el mes anterior, y con una entrevista a Jagger que se nos fue de las manos, anduve un poco decepcionado. Pero me quedé pensando que, por lo menos ese sábado, luego de su juerga limeña, Mick nos habría tenido en cuenta. Posiblemente mientras andaba dando botes en su cama.
Javier Lishner Santa Clara, California 20 de noviembre de 2009
Esta tampoco fue la más revolucionaria canción de rock de todos los tiempos ni la que más influencia ejerció sobre las nuevas generaciones. Fue solo un tema importante en la carrera de Golden Earring. En realidad, fue el más importante de todos, y, como dice Mick Jagger, I like it, like it, yes, I do... El tema, por coincidencia, es contemporáneo de "Razamanaz" de Nazareth, de quienes escribimos ayer. Se llama "Radar Love", fue incluída en el disco Moontan de 1973 y salió del puño y letra de George Kooymans y Barry Hay.
Los intérpretes son holandeses y denominaron Golden Earring a su banda. Eso fue hace ya muchísimo tiempo. Casi el mismo tiempo que llevo yo en este planeta. En realidad, somos contemporáneos. Aunque Golden Earring, de acuerdo a su bajista Rinus Gerritsen, comienza a contar su historia desde mediados de los sesenta. De lo contrario, habrían de ser posiblemente la banda de rock and roll en actividad más longeva de la historia. Incluso, un poco mayor que sus colegas los Rolling Stones. Allí, juntos están hasta hoy: Kooymans, fundador del combo, en voces y guitarra; Hay, desde 1968, en voces, guitarra y flauta; Gerritsen, co-fundador, en bajo; y Cesar Zuiderwijk, miembro desde 1970, en batería.
En el Perú no recuerdo la publicación de Moontan, pero sí la manera que las principales emisoras juveniles de la época, como Miraflores y Atalaya, tocaban a rabiar esta canción... Y para obtenerla tuve que esperar a que apareciera como parte de una recopilación de canciones de diversos intérpretes que se llamó Super Go. Creo que fue parte del Volumen 4 que lanzó El Virrey en 1974. La idea del disco fue de Gerardo Manuel, ejecutivo discográfico, popular disc jockey y pionero del rock en el Perú, quien por esos días -como cantante de Pax- había hecho una muy bien lograda versión de este tema en español bajo la batuta de Pico Ego Aguirre. Solo así, como parte del Super Go, pude obtenerla. Lo demás es una bella historia.
Javier Lishner Santa Clara, California 18 de noviembre de 2009
Tuesday, November 17, 2009
UNA CANITA AL AIRE: Nazareth
No fue la canción más revolucionaria de su tiempo ni la que más influenció en los nuevos grupos del rock and roll. Fue solo un tema importante en la carrera de Nazareth, pero, como dice Mick Jagger, I like it, like it, yes, I do... Porque fue Nazareth una de las primeras bandas a las que le hice caso. Su "Razamanaz", producido por Roger Glover, me rompió el coco repetidamente. Pero cuando en 1975 adquirí el Greatest Hits, cuyo primer surco del lado "A" comenzaba con esta canción de Joni Mitchell, me convertí en permanente seguidor de la banda. Nazareth, al lado de otros como Status Quo, Sweet y Pink Floyd, había sido uno de los primeros grupos de rock de quienes me había aprendido de memoria el nombre de sus integrantes: Dan McCafferty en voz, Manny Charlton en guitarra, Pete Agnew en bajo y Darrell Sweet en batería. Su logotipo, inolvidable.
Imagino que la cantautora canadiense nunca pensó que cuatro escoceses, semi-locos, pelucones y bebedores de whisky, le iban a interpretar tan bien una de sus canciones. Tanto como que Richard Berry hubiera imaginado en 1955, que veintitrés años después otro pelucón de nombre Lemmy, junto a Motörhead, le iría a grabar su hermosa "Louie Louie". O que, inlcuso, ellos mismos imaginaran que otros, más pelucones y más locos que ellos -como los Guns 'N Roses-, les irían a grabar su tan personal, "Hair of the Dog".
"This Flight Tonight", original del álbum Loud 'N' Proud de 1974 (también producido por Glover) es hoy solo una canita al aire para los que gustamos del rock simple y puro. Aquel con guitarra, bajo y batería. Y si llega acompañado de una aguardientosa voz, como la del cantante de "Love Hurts", aún mejor. Para qué más. Salud.
Javier Lishner Santa Clara, California 17 de noviembre de 2009
Monday, November 16, 2009
RECORDANDO LA CALCOMANÍA
No sé hace cuántos lustros hará que esta calcomanía aurinegra era muy famosa en esta área de la Bahía de San Francisco. Por aquellos días de los setenta, la emisora más popular era la KOME que tenía como competencia a la KSJO, otra estación con sede en San Jose, California. Hoy, mientras la KOME, aunque rockera, se convirtió en una radio netamente dinosauria; la otra - que (no por coincidencia) fue recientemente adquirida por el gigante Clear Channel-, de la noche a la mañana se convirtió de rockera a una estación de música mexicana. Rubén Blades diría, sorpresas te da la vida; para mí, sorpresas no da el dinero. La música, como tal, poco importa. La pasión por el género, menos. Integridad que le llaman.
El último fin de semana, mientras conducíamos de regreso a casa escuchando a Motörhead, nos topamos en la autopista con un vehículo de marca Jeep que, en su ventana posterior, tenía pegado el sticker de la otrora famosa KOME, la radio que en los 98.5 del dial fue durante 26 años años la mejor aliada del aún joven rock and roll (hasta convertirse en la radio líder en toda la nación). Cuando algunos comenzaron a meter sus narices, y su dinero también, la KOME desapareció. Su final fue en 1998. Actualmente, bajo la propiedad de Clear Channel, se denomina KFOX. Es allí donde si uno quiere escuchar a The Eagles, Journey o Van Halen, puede sintonizarla a cualquier hora del día y podrá emborracharse con esos artistas. Greg Kihn, a quien escuchaba hace quince años -durante los días en que (él) trabajaba en las noches-, es desde hace buen tiempo la estrella de las mañanas y voz de la Corporación. Eso es lo que me apena. Porque el tipo parece genial...
Lo que fue sin duda anecdótico, fue encontrar un coche moderno con esa antigua calcomanía de una radio que desde hace mucho no existe. Y hasta me provocó ponerle al mío la calcomanía clave de Radio Panamericana de Lima, que por allí conservo con un poquito de cariño. (FOTO: Javier Lishner).
Javier Lishner Santa Clara, California 16 de noviembre de 2009
Sunday, November 15, 2009
ROLLING STONES. 11/15/89
Hace tres días, los hijos llevaron a sus padres a ver a Debbie Gibson. Ayer, los padres llevaron a sus hijos a ver a los Rolling Stones... Con una oración como esta, hace veinte años, el Miami Herald informó sobre el acontecimiento musical de fines de la década del ochenta: el regreso de los Rolling Stones luego de siete años de temporal separación. La noche anterior, los Stones habían rockeado el Orange Bowl por primera vez. Y, tres días antes, cual contraste, la juvenil cantante de Brooklyn -que era la sensación pop del momento- había actuado no muy lejos de allí, en el Miami Arena, adonde habíamos llegado como invitados de la discográfica.
Programa oficial de la Steel Wheels Tour.
La preparación para esta odisea fue casi como siempre tuvimos que hacer con el rock. Comenzar desde el llano. Por ser el rock un tipo de música que por esos días, al menos en el Perú, no rendía los dividendos que arrojaban otros ritmos como la salsa, por ejemplo. Era noviembre de 1989. La carrera me había llevado a ser mis pinitos en prensa a través del diario Expreso y, televisión, en Canal 13 de Lima (hoy, ambos con diferentes dueños). Y en los dos lugares lugares tuve que planificar bien el paquete. Para ello conté con la invalorable colaboración de mi amiga Sonia Freundt en el 13, y las emprendedoras María Rosa Álvarez Calderón y Lorena Ausejo en Expreso.
Casi desde la primera vez que escuché sobre los Rolling Stones, su nombre había estado vinculado a la separación. Los pleitos entre Jagger y Richards eran eternos, y el periodismo aprovechaba esa inestable relación para publicitar la posible ruptura. Después de todo, los Beatles se acababan de separar y, la monería -y poca experiencia del rock, que al momento tendría poco más de 15 años- hacía presagiar el desbande del grupo que automáticamente había heredado el trono de los cuatro grandes de Liverpool.
"Start Me Up", tema para el inicio.
Los Rolling Stones se formaron en Londres en 1962 de la mano de Brian Jones, Ian Stewart, Mick Jagger y Keith Richards; los dos últimos, ex-compañeros de escuela. A diferencia de los Beatles, su opción fue predominantemente agresiva. Hasta hoy muchos creemos que -amén de los buenos temas y su original propuesta, tomada del más profundo blues americano- fue una muy buena estrategia para introducir el producto en un ambiente de yeah yeah yeahs! Fue así como las piedras comenzaron a rodar abriéndose un camino.
Dos décadas más tarde, el 25 de julio de 1982, en Leeds, Inglaterra, el grupo que Jagger y Richards compartían entonces con Charlie Watts, Bill Wyman y Ronnie Wood, había hecho la última presentación de la European Tour 1982. Esa aventura había sido la continuación de la gira norteamericana que habían iniciado sorpresivamente el año anterior en un pequeño club nocturno de Worcester, Massachusetts. Fue la gira que apoyó el lanzamiento del disco Tattoo You.
Por eso, el 15 de noviembre de 1989, en el más grande escenario que jamás se hubiese construído para un grupo de rock, los Rolling Stones iniciaron su show en el Orange Bowl con "Start Me Up" [video]. La gira de la reunión la habían denominado Steel Wheels y empezaba a batir varios récords. En contra de muchos pronósticos, los Rolling Stones estaban de vuelta... completos, fuertes y dispuestos a nunca más dejar pasar el tiempo.
En el Orange Bowl la tarde del debut en noviembre del 89.
De esa tarde recuerdo claramente cuando enrumbamos hacia el estadio. Éramos un grupo que representaba a la Empresa Radiodifusora 1160 de Lima, que compartían, entre otras, Radio 1160 y Canal 13 de televisión. Alejandro Beck, Branny Zavala Jr., Sonia Freundt, Mario Jiménez y quien suscribe, andábamos allí. Pero, además, cuatro ganadores de un concurso que la empresa había organizado en Lima. En la tarde, habíamos tenido oportunidad de ingresar al estadio y estar frente al mismísimo escenario en el que horas después aparecerían los Rolling Stones.
"Bitch", "Sad Sad Sad", "Undercover Of The Night", "One Hit To The Body" y "Tumbling Dice", fueron suficiente preámbulo para "Miss You". Una extensa versión del tema de 1978, publicado en el Some Girls, hizo lucir a Bobby Keys, ese extraordinario saxo tenor que, cuando aún era un quinceañero, había comenzado su carrera acompañando a ídolos como Buddy Holly y Bobby Vee.
Para los nostálgicos y románticos, no hubo "Angie" pero sí, "Ruby Tuesday". Sin exagerar, yo recordaba a mi compatriota Roxana Valdivieso y sus maravillosas interpretaciones que hacía de ese tema, con Breeze, en los festivales de verano en La Honda, el balneario al sur de Lima. Para continuar con ese tierno momento llega "Play With Fire", antiguo tema del Out of Our Heads, que rescataron en esta gira. Y, como para romper con la balada, le sigue "Rock And A Hard Place", uno de los sucesos del nuevo álbum.
Mick & the Boys.
"Mixed Emotions", escrita por Jagger y Richards mientras pasaban sus vacaciones en Barbados, abre paso para otro de los más esperados temas: "Honky Tonk Women". La canción, inspirada por Jagger y Richards mientras pasaban sus vacaciones en Brasil, fue otro de los temas que dejó lucir al original guitarrista del grupo, que desde siempre fue uno de los más asediados. Pero no satisfechos con ese recuerdo, continúan con "Midnight Rambler" y "You Can't Always Get What You Want". Sí, Mick, habíamos conseguido lo que queríamos.
Decir que interpretaron veinticuatro canciones no sería exagerar. Creo que en las ocho veces que me tocó verlos en seis diferentes giras ese ha sido el número de la suerte. Pero aquella vez, siete años fuera de la vitrina, el esfuerzo merecía de sobra. "Before They Make Me Run", escrita como respuesta al arresto de Richards por posesión de heroína en Toronto en 1977, había marcado la despedida momentánea del vocalista quien le había cedido el micrófono a su ex-compañero de escuela. Richards, que cantar no es lo que mejor hace, interpreta otra más. Fue "Happy", que sellaba el momento en que toda la atención había recaído prácticamente sobre él. Sin cantar bien, Keith brilla. Es mucho más que su voz; para mí fue recordar el primer día que escuché la canción en el Exile on Main Street de 1972 y que luego obtuve en el Made In The Shade.
El elenco de la gira. ¿Y dónde está Charlie?
Con Jagger nuevamente en la delantera, Wyman quieto en el bajo, un técnico Watts en la retaguardia y un simpático Wood con cigarrillo en la boca, los Stones se lanzan con todo a la última etapa del show. Así llegan "Paint It Black", "Light Years From Home" (que mi amigo Hugo Salazar tocaba subterráneamente en sus programas), "Sympathy For The Devil" y "Gimme Shelter" (del disco del mismo nombre que compré de vacaciones en Colombia cuando aún estaba en la secundaria). El nudo en la garganta nadie lo nota. Las lágrimas cambian su sentido y se van para adentro. Sabía que estaba a muy poco de escuchar en vivo mi canción favorita de toda la vida. Pero, antes de eso, me clavan la lapicera en el corazón interpretando "It's Only Rock 'N Roll", cuyo disco sencillo compré cuando apenas apareció, en 1973, poniendo en riesgo mis propinas semanales.
Nadie se cansa. El viejo estadio de la ciudad de Miami, inaugurado en 1937, un año después del nacimiento de Wyman, sigue en el 1501 de la NW 3rd Street sosteniendo a más de 70 mil personas. Y allí seguíamos nosotros, unidos, borrachos de alegría, viendo el desenlace final de lo que se estaba convirtiendo en una noche inolvidable. Y "Brown Sugar" nos devuelve a la realidad. Pero aún faltaba la mía. Y la mía llegó justo antes de que se despidieran. "Satisfaction", el tema que en 1964 les abrió el mercado americano, sirvió para que dijeran adiós. La banda, con el acompañamiento de esa formidable sección de vientos llamada The Uptown Horns, tres coreutas como Bernard Fowler, Lisa Fischer y Cindy Mizelle, Keys en el saxo, y Matt Clifford y Chuck Leavell en teclados, había cumplido el pacto con el sureste de la Florida. Pero la guitarra de Richards anuncia que los Stones estaban de vuelta y, con "Jumping Jack Flash", dan la estocada final. Nos miramos mudos. La cosa esta había terminado.
Steel Wheels fue la gira que le dio el espaldarazo al promotor Michael Cohl, hoy, dos décadas después, el más poderoso del mundo. Esa fue la que perdió Bill Graham, quien, al ser consultado más tarde sobre el fracaso de su propuesta, diría: "Perder esa vez a los Rolling Stones fue como ver a mi amante favorita convertirse en puta". La troupé artística seguiría al día siguiente hacia Tampa para luego aterrizar en Atlanta. En tanto que nosotros comenzábamos a preparar maletas para nuestro regreso a Lima.
El auspiciador oficial.
El 14 de mayo de 2008, luego de 70 años, el Orange Bowl pasó a mejor vida. Un nuevo proyecto le pasó por encima y se llevó sus recuerdos de los días en que, incluso antes que los Rolling Stones, nombres como Genesis, The Jacksons, Madonna, Pink Floyd y Prince, lo habían visto radiante. Tal como nos tocó verlo una simple noche de hace veinte años que, con Living Colour de telonero, se convirtió en una de las más lindas de la carrera.
Javier Lishner Santa Clara, California 15 de noviembre de 2009