Saturday, November 21, 2009

LLENA TU CABEZA DE PISCO

Como mencionamos hace un par de días, la frustración es sinónimo de chasco, fiasco, desengaño. Todo lo opuesto a ilusión, aquello con lo que entre más joven se es, con mayores ganas se anhela. Eso fue precisamente lo que nos sucedió en enero de 1981 cuando intentamos entrevistar a Mick Jagger. No obstante, por nuestro empuje y juventud, no nos dimos por vencidos. Como se dice, teníamos que sacarnos el clavo... algún día.


Tuvieron que pasar más de ocho años para que esa ilusión de entrevistar a la estrella volviera a brotar en nosotros. Se acercaba la última década del siglo 20 y, los Rolling Stones, también luego de varios años, anunciaban una nueva gira. La iban a llamar Steel Wheels, y era su regreso triunfal con los mismos integrantes que se habían despedido una noche de julio de 1982 en el Roundhay Park de Leeds, en Inglaterra.

Mientras en alguna parte del mundo, Mick Jagger, Keith Richards, Bill Wyman, Ronnie Wood y Charlie Watts, se preparaban para su segundo debut, paradójicamente, en el Veterans Stadium de Philadelphia; en Lima, algunos hacíamos preparativos para viajar donde fuera con tal de no perdernos una actuación de la banda más grande del mundo.

Como quiera que andábamos trabajando en la televisión, y no por coincidencia en un programa de música -donde transmitíamos videos y entrevistas-, las gestiones para capitalizar la idea no fueron del todo ajenas. El primer paso fue dado por la empresa telecomunicadora y, el segundo, también: autorizar el viaje y confirmar el lugar del destino. Los Rolling Stones iban a estar en Miami el 15 y 16 de noviembre, y era hasta allí adonde íbamos a llegar.

Entre los papeleos administrativos hubo uno que nos devolvió la esperanza de superar la frustrada entrevista a Jagger en el 81. Y fue cuando se le pidió a la casa discográfica que representaba a los Stones en el Perú, la CBS, que moviera sus tentáculos para ver si existía la posibilidad de una reunión con la banda. Y CBS lo hizo, como consta en el documento que enviaron a sus pares de la Ciudad del Sol, para que nos tuvieran en cuenta en el rol de entrevistas que el grupo iba a brindar en Miami. A Canal 13 de Perú, empresa en la que trabajaba, se le concedió un espacio inmediatamente después de la que iba a tener la brasileñísima Rede Globo. Así, con esa ilusión, viajamos.

Pero, en Lima, antes de subir al avión, mi colega Sonia Freundt -quien conducía acertadamente El Ranking- y quien suscribe -quien conducía Mirando la Radio- tuvimos una brillante idea. Comprar un par de botellas de pisco -la bebida peruana por excelencia- para obsequiarles a los Rolling Stones luego de la entrevista. Y lo hicimos en el duty free del aeropuerto internacional Jorge Chávez. Era noviembre de 1989. Allá nos esperaba gente relacionada a la prensa y amigos que, finalmente, nos tratarían muy bien. Aurora Guzmán, Sarah Bejarano y Luis Alberto Sínchez, entre ellos.

El arribo fue normal. Nuestro foco, puesto en la presentación de la banda y su respectiva entrevista, comenzó a cambiar un poco en la medida que empezaron las invitaciones y compromisos. Un festival peruano en donde se reunían don Óscar Avilés y Arturo "Zambo" Cavero, el show de Debbie Gibson en el Miami Arena, Bob Dylan en Sunrise, el Festival OTI que ganaría México el siguiente fin de semana, etc. Y, en medio de ese ambiente de fiesta y de compromisos, una noticia que nos volvió a robar la esperanza: "Luego de sus exitosas actuaciones en el Superdome de New Orleans y en el Cotton Bowl de Dallas, los Rolling Stones arribaron a Miami... y acaban de cancelar todo contacto con la prensa". Y los piscos se quedaron esperando hasta esa noche que por ahora, luego de veinte años, prefiero no recordar.

Javier Lishner
Santa Clara, California
21 de noviembre de 2009

NOTA RELACIONADA:
- LLENA TU CABEZA DE ROCK

10 comments:

Javier Vasquez L said...

Me parece increible lo q cuentas...! En éste y en el post anterior, pero, en el encabezado del blog dice que le diste la mano a Jagger, te referias a la ocasión del Country? O después se dió otra mejor oportunidad? Pues es muy cierto eso de: el que la sigue la consigue...saludos!

Duda said...

bueno ahora si, el de la foto eres tu, lleno de pisco.

Javier Lishner said...

No, mi hermano, solo dos de esas oportunidades. La del Hotel Country Club y la de Miami. En cuanto a lo que dices que es muy cierto, de que "el que la sigue la consigue", te voy a ser muy sincero. Ya no estoy interesado. Entrevistar a Mick Jagger hoy, además de que podría ser un proyecto millonario, sería como entrevistar a un robot. No va a decir nada que no sea lo que él ya sabe contestar y para eso, francamente, prefiero entrevistarte a ti o a Lucho Argüelles. Para hacer una entrevista pactada, prefiero ser libre y feliz en mi casa. Para qué otra frustración. ¿No te parace?

Esas dos oportunidades se me escaparon de las manos y allí quedó. Long Live Rolling Stones!

Un abrazo,

JL

Javier Lishner said...

Hola Duda:

No sé adónde quieres llegar con tanto enigma.

Saludos,

JL

Luis said...

Bueno creo que el destino de los Piscos es obvio que tuboun mejor destino y uso.Saludpor eso Don Javier.
Luis de jesus maria

Javier Vasquez L said...

Eso de las entrevistas a artistas de los que uno es fan, es siempre algo trabajoso, pues siempre quisiéramos preguntar "las rebuscaditas", pero tienes que hacer las clásicas o las "generales" para el publico masivo.

Me sucedió mas de una vez, y, es cierto, a estas alturas a Jagger ya le han hecho todas las preguntas que se haya imaginado en su vida y ya sabe que responderá cada una de ellas.

Saludos!

Javier Lishner said...

Hola Luis:

Sí, ahora parece gracioso. Pero aquella tarde fue interminable... jajaja. A propósito, cuando me empiezan a llamar don Javier, me preocupa.

Un abrazo bien peruano como el pisco,

JL

Javier Lishner said...

Hola tocayo:

Bueno fuera que sir Mick supiera qué contestar a cada pregunta. Lo feo es que debe contestar "esas" respuestas y simplemente no permite las que no quiere. Jagger es mucho más que él. Para mí es casi como una corporación per se. Todo tan bien controlado que ya perdió su encanto... Mas no como performer.

Un abrazo,

JL

Jorge S said...

Interesante anecdota,,,, y el pisco estuvo bueno? (jajajajaja), ya habrá oportunidad para que pruebes un buen pisco
Un Abrazo

Javier Lishner said...

Hola Jorge:

No te preocupes que el día que vaya de visita a Lima, en mi lista, está ir a buscarte para que me des el pisco que me ofreciste hace un tiempo... No me he olvidado. jaja.

Un abrazo,

JL