Tuesday, August 19, 2008

LEROI MOORE, SAXOFONISTA DE LA DMB

Y, Isaac Hayes, no se fue solo. Cinco días después que él, sucedió con Jerry Wexler, y, hoy, con LeRoi Moore, el extraordinario saxofonista de the Dave Matthews Band. Como dice la leyenda, se va uno, y se va con dos más. Tres nombres menos en el campo, mas no en la historia de la música popular.


Vi por primera vez a the Dave Matthews Band en el otoño americano de 1997. Aquella fría noche la cerró the Smashing Pumpkins. Era el tiempo de Crash, el disco lanzado el año anterior, con canciones como "So Much to Say", "Crash into Me", y "Say Goodbye". La placa era una de las favoritas para tocar en mi coche. Había sido producida por el genio inglés Steve Lillywhite. Recuerdo que con ese disco también adquirí Under the Table and Dreaming, de 1994.

Hoy, el saxofonista y miembro fundador del grupo, LeRoi Moore, intempestivamente dejó de existir en el Hollywood Presbyterian Medical Center de Los Angeles. Moore recientemente había regresado a su residencia californiana para una intensiva rehabilitación física. El artista había tenido un accidente a fines de junio pasado, cerca a su granja de Charlottesville, Virginia.

Le Roi Moore, cuyo nombre original fue Gary Lee Moore, nació en Dunn, North Carolina. Cuando Dave Matthews lo encuentra en 1991, ya era un reconocido músico de jazz en el área de Charlottesville. Como muchos quienes dominan el saxo, Moore también dominaba, entre otros instrumentos, el bajo, el clarinete y la flauta. Además de su permanencia en la DMB, LeRoi había participado como músico de sesión en diferentes discos como In November Sunlight de Soko, el primero de Code Magenta, y, Musical Chairs de Hootie & The Blowfish.

A pesar de la tristeza que dejó la partida de su compañero y miembro fundador, the Dave Matthews Band realizó su presentación de esta noche en el Staples Center de Los Angeles. El propio Matthews se encargó de anunciar el fallecimiento de "nuestro querido amigo", a la platea reunida en el local angelino. Jeff Coffin, el hombre de Béla Fleck and the Flecktones, quien venía reemplazando a Moore, también estuvo esta noche brindando tributo al titular del puesto.

Aunque, luego del inesperado evento, aún no está dicha la última palabra oficial del grupo, la DMB tiene planificada en septiembre una gira a Sudamérica (al lado de Ben Harper and the Innocent Criminals) para presentaciones en Manaos y Sao Paulo y, luego, en Rio de Janeiro, en un espectáculo exclusivamente de ellos. De seguir con lo planeado, el 3 de octubre, la banda norteamericana recaería en Buenos Aires para compartir el mismo escenario con Fito Páez y La Portuaria.

En el show de hoy, en el sur de California, la Dave Matthews Band inició su espectáculo con "Bartender", una canción que dice: "And if I go, before I'm old/ Oh brother of mine, please don't forget me if I go. And if I die, before my time/ Oh sweet sister of mine, do not regret me if I die."

En septiembre, LeRoi Moore iba a cumplir un año más de vida. Hoy, a los 46, Moore descansa en paz.

Javier Lishner
Santa Clara, California
19 de agosto de 2008

2 comments:

Anonymous said...

hola javier. se van en mancha que pena realmente que gente que tanto aportaba al arte se vaya de este planeta que algun dia dejaremos; una pena lo de constantino carvallo tipos como el hacen falta en el pais; pero asi es la vida se van los mejores y se quedan los parasitos. lo bueno de todo esto es que aun seguimos vivos y el mejor homenaje para nuestros idolos es oir su musica, su predica es el mejor homenaje a estos heroes del rock n roll y de la educacion.


siempre un placer leer tus post javier

Luca
Atlanta, Ga

Javier Lishner said...

Hola Luca:

Te voy a ser sincero que cuando vi a DMB, me llamaron muchos la atención la sección vientos y cuerdas. El violinista me sacó de cuadro, al igual que el cantautor líder, y el desaparecido saxofonista. Me gustó mucho el grupo, al que pude ver nuevamente unos años después, en una tarde rockera que cerró Crosby, Stills, Nash & Young.

De Constantino Carvallo, no dudo que fue un gran maestro. Escucharlo hablar era una lección. Verdaderamente único. Ireemplazable en el medio. Además, una gran pérdida para el Club Alianza Lima.

Los ex-alumnos Maristas, de paso, estamos de duelo.

Recibe un fuerte abrazo,

JL