Thursday, January 27, 2011

Perú Rock
EL DÍA QUE NOS PIRATEARON EL NOMBRE

En 1991, un grupo de jóvenes empresarios arequipeños había decidido tomar el nombre del otrora programa de radio limeño y de su respectiva gira, la que, al igual que el programa, había terminado casi abruptamente a raíz del "paquetazo" económico del primer gobierno de Alan García Pérez.


Por esos días andábamos residiendo en Ica, al sur de la capital, y casi terminando nuestro contrato de seis meses en la dirección de Radio Efextos, la nueva FM de esa hermosa tierra del sol. Pero, más al sur, en Arequipa, tuvimos otro trabajito extra. La de cuidar el nombre de Perú Rock, el cual, con Sammy Sadovnik, habíamos patentado tan pronto decidimos esa nomenclatura al lado de nuestro asesor publicitario y amigo, Freddy Chirinos Peña.

El arribo de quien suscribe a Arequipa cayó de sorpresa no solo al elenco artístico que llegaba de Lima sino a los mismos empresarios, quienes de inmediato ofrecieron las disculpas del caso y, como siempre ha sido la costumbre arequipeña, atendernos de la mejor manera. A esas alturas, a nosotros no nos quedaba más que apoyar el intento. Lo otro hubiera sido entablar una acción legal que, en el Perú, tal vez, no hubiera llegado a ningún cause. Además, el empeño puesto en la producción no merecía ser como el perro del hortelano, como, coincidentemente, diría años después García Pérez.

A continuación, la crónica del evento de dos días realizado en el coliseo de la Ciudad Blanca, al que habíamos asisitido en varias ocasiones desde los días de La Más Más. Apareció en las páginas del diario peruano Expreso, el 25 de septiembre de 1991.

SEIS GRUPOS PARA UN FESTIVAL
Sólo faltó el público


Llegamos a Arequipa procedentes de Ica, ciudad en la actualmente residimos. El objetivo era uno: estar presentes en el festival de rock que el grupo Excalibur había anunciado para el viernes 20 y sábado 21, con las actuaciones de Catedral de Humo, We All Together, Frágil, Rio, Nina Mutal y Miki González. Después de todo, eventos como éste no se dan todos los días.

VIERNES 20:
CATEDRAL DE FUERZA

Faltando dos minutos para las veinte horas, el coliseo cerrado de la blanca ciudad estaba listo para el inicio. "Violación" fue el tema elegido por Catedral de Humo, un quinteto local de experimentados músicos, para dar inicio a su espectáculo.

Alfredo Villavicencio (voz), Roberto Otoya (guitarra), Pedro Requena (bajo), Lucho Escobedo (bajo), y Oscar Chaúd (batería), interpretaron un set de ocho canciones de las que hicieron un bis de "Violación" y "Sueños del alma".

Con fuerte influencia de los setenta, Catedral fue, con temas propios, un buen comienzo para el festival de dos días que los organizadores denominaron Perú Rock 91.

WE ALL TOGETHER, SIEMPRE
Pasadas las 21 horas, Carlos Guerrero subió al escenario con sus compañeros, al momento que el público, apostado en las graderías, decidió bajar a la cancha.

"Carry On Til Tomorrow", fue solo una muestra -la primera de muchas- que Guerrero junto a Varvarande, Samamé, Pacheco y Saldarriaga, mostrarían muy bien sobre el gran escenario que de fondo lucía el logotipo del espectáculo (que no era el mismo que patentamos hace unos años con Sammy Sadovnik).

FRÁGIL NO ES TAL
Demostrando una vez más que, en su larga carrera de quince años, el quinteto no tiene nada de lo que significa su nombre, Dulude, Bustamante, Valderrama, Castillo y Durand, dieron el súper show de la noche. No en vano pasan los años y los ensayos en Jirón Yurúa del distrito de Breña.

Frágil, para el final, dejó sus populares "Como un loco" y "Avenida Larco", esta última solicitada desde los primeros minutos que los músicos subieron al estrado.

La energía de su cantante y el sentimiento de todos, amén de su reconocida calidad, hicieron de Frágil lo más destacado de la primera fecha.

Boleto de cortesía en Arequipa (Archivo Perú Rock).

SÁBADO 21
RIO, EL MEJOR
Con menos asistencia que la noche anterior, Rio andaba preparado para iniciar su presentación. Hacía un mes, el grupo solo había llenado el mismo recinto. Esta vez lo hacía compartiendo el cartel con Nina Mutal y Miki González.

"Al Norte de América" marcó el punto de partida del quinteto de Pueblo Libre. Rio no perdió tiempo en modular su sonido.

Pocho, Cucho, Chachi, Lalo y Armando, nos sorprendieron con una nueva y larga versión de "Son colegialas", la que no presentaba en vivo desde hacía mucho tiempo. También con el avance técnico del grupo que, actualmente, hace uso de los modernos secuenciadores. La ciencia y la tecnología al servicio de Rio, lo mejor del festival. Buen sonido, conocidos temas, carisma y popularidad, la que tienen de sobra en Arequipa, fueron suficientes para su presentación que duró cerca de hora y media.

NINA, SE SIENTE EL RITMO
"Una y otra vez" mostró la figura de Nina Mutal en el escenario. Con el estrenado "Siente el ritmo", la artista agradeció al público. Con "Mírame", Nina demostró sus notables progresos como artista y cantante. "Lo que quiero", otro estreno de la noche, y "Cuerpo a cuerpo", le sirvieron para ser muy aplaudida y despedirse de la platea que, a esa hora -las once de la noche- no era mucha.

La banda de Nina Mutal es muy buena. Nos agradó el trabajo del teclista. El guitarrista, por su parte, le da mucha fuerza a las canciones.

MIKI, SABOR
Finalizado el festival realizamos una breve encuesta entre los asistentes a los dos días del evento. El triunfador fue Miki González. Y es que Miki sabe cómo hacerla.

La presencia de la familia Ballumbrosio en el escenario arequipeño, como era de esperarse, le dio un toque único a su show. Sobre todo, cuando pasadas las doce de la noche, el cantautor y guitarrista invitó a don Amador, padre de los muchachos y maestro del violín y el zapateo. Palmas para don Amador, palmas para Filomeno. Más palmas para el maestro, más palmas para su hijo. El espectáculo se convirtió en aplausos, baile, color, aquel que le pone el sabor chinchano que Miki González bebió en El Carmen.

Un envidiable final para un festival en el que hubo organización, buen trato, nivel artístico, mucha promoción y, en el que solo faltó el respetable, base fundamental para el éxito.

Javier Lishner
Santa Clara, California
15 de abril de 2008

1 comment:

Anonymous said...

HOla Javier,
tienes una idea aproximada, de cuantas personas acudieron al concierto?
Un abrazo,
HEL de Los Olivos