Wednesday, December 08, 2010

EL MICRÓFONO Y YO (PARTE I)

Hoy, 8 de diciembre, se celebra el día del Locutor en el Perú. Coincide que es un día feriado, por esto de la Inmaculada Concepción, y el ente regidor de los locutores, la Asociación de Locutores del Perú -que últimamente recargó baterías y cuyas elecciones generales son justamente hoy- celebrará la ocasión con una reunión de colegas y amigos en un almuerzo de camaradería. Para todos mis colegas y amigos, un feliz día.

Entre 1992 y 1994, junto a Johnny López, sempiterna figura peruana de la radiodifusión, realizamos una gira educativa de dos años por diversos lugares del territorio peruano. La principal razón fue la de llevar nuestras experiencias por algunos rincones del Perú profundo donde, al igual que en la capital, los jóvenes, ávidos de interés por el micrófono, se esmeraban por aprender.


Durante esos años de imaginación y creatividad, como le llamo al tiempo que trabajé en la radio, pude a la vez aprender de otros; algunas veces, desde las cabinas, y, en otras, a través de instituciones educativas. Por ejemplo, con Juan Alberto Mata, ahora apostado en Costa Rica, asistimos a un curso de Producción de Televisión Educativa de 120 horas dirigido por Óscar Mavila, en el Centro de Teleducación de la Universidad Católica del Perú. Años más tarde, con Sammy Sadovnik, actualmente en Telemundo, acudimos a seminarios de la Facultad de Comunicaciones de la Universidad de Lima que, por esos años, tenía como Decana a la españolísima Rafaela García. En el verano del 87, con músicos como Juan Carlos Caipo y los hermanos Óscar y Coco Bravo, concluimos un curso de Producción de Radio y Televisión en el Instituto Toulouse Lautrec de Lima. O sea, mientras trabajábamos y avanzábamos en la carrera, también nos íbamos cultivando.

En las cabinas, hubo algunos nombres que nunca podría olvidar. De ellos, existen dos que si bien es cierto no me descubrieron, sí les debo la razón de haber continuado en la profesión. La primera, una dama. El segundo, un caballero.

En 1980, con apenas unos meses en los micrófonos, quien suscribe era un vil desconocido. Claro, con algunos pergaminos personales bajo el brazo pero nada importante en lo que a medios de comunicación se refiere. Lo cierto es que en casa me habían conseguido un trabajo "serio" en la Compañía de Seguros El Sol. Y, seguramente, iría a ganar más soles, la moneda peruana por excelencia, que los que me pagaban en la radio por conducir Reunión Acústica, un programa diario de tres horas que comenzaba a las diez de la mañana.

La programación de Radio Miraflores FM por aquellos días era algo así: Noticiero El Momento de 6 a 9 a.m.; Miraflores a las Nueve, con Ricardo Fernández; Reunión Acústica, de 10 a.m. a 1 p.m.; música continuada de 1 a 2 p.m. hasta que llegó Juan José Vizcarra con un espacio demasiado loco para la época y las primeras llamadas al aire en la historia de la FM peruana; Jorge Cox a partir de las 2 p.m. con El Juke Box International (La Hora del Juke Box), y Hugo Salazar de 3 a 6 p.m. con La Música está aquí. Liliana Sugobono seguía con El Expreso de la seis y, una hora después, aparecía Jorge Henderson en la versión con sonido dolby de Mundo Musical Iberoamericano -el embrión de Enhorabuena-, que en la AM iba a las 10 de la noche. Le seguía Gerardo Manuel con La Hora Pirata. A las diez, Martha Mifflin dedicaba una hora a la música clásica. La salsa no existía en la frecuencia modulada aunque, paradójicamente, sería en Radio Miraflores, muy poco tiempo después, en donde se escucharía por primera vez bajo la conducción de Luis Delgado-Aparicio Porta.

Para tomar el puesto en Seguros El Sol, que nunca quise, hube de haber dejado el matutino programa que desde hacía pocos meses -con la cortina musical tomada de Viaje al Centro de la Tierra de Rick Wakeman-, animaba en la emisora de Alcanfores. Al llegar a gerencia con la noticia, se me invitó a que me fuera. "Tú puedes tener éxito en seguros", me dijo Buby, el director-gerente, quitándome casi el último apoyo que me quedaba. No tenía ni veinte años y el mundo se me derrumbaba. Salí de la oficina y si no tiré la puerta fue porque en casa nos habían enseñado que eso no era de gente educada. Preferí mantener la educación aunque quise mandar a la mierda a la radio y buscar un futuro diferente. Por primera vez se me hacía un nudo en la garganta. Pero fue ahí cuando aparecieron un par de personas, y la historia viró con el viento a mi favor. Reunión Acústica, a pesar del trabajo de saco y corbata en Seguros El Sol, no desapareció.

La dama y el caballero, no solo hicieron que me quedara sino que se convirtieron en verdaderos ejemplos para lo que vino después. Él por perfeccionista, ella por apasionada.

Javier Lishner
Santa Clara, California
14 de mayo de 2008

4 comments:

Anonymous said...

Felíz Día del Locutor apreciado Javier. Eres parte de la historia de la radio y la TV musical peruana. Muchas felicidades.

Gregorio Huaroto
Desde "arkivperu.com/blog"
(ya en "arkiv" viene la serial "Batman" cuando se transmitió por Canal Cinco)

PD: Javier, ¿por qué no vuelves al Perú a trabajar en medios? Aquí está parte de tu vida...

Duda said...

Todos vuelven a la tierra en que nacieron...

Javier Lishner said...

Hola Gregorio:

Gracias por tu saludo el que agradezco viniendo de alguien tan profesional y conocedor como tú.

La verdad que, desde lejos, sí tuve el día muy presente y recordando a gran parte de mis colegas con los que alguna vez me tocó trabajar.

Creo que fui afortunado de conocer a muchos colegas que luego se convirtieron como en parte de mi familia.

Un abrazo,

JL

Javier Lishner said...

Duda:

Sabes mucho. Con eso mismo es que comienzo el blog de mi promo del colegio. Será que es una coincidencia...

http://maristas1977.blogspot.com/

Un abrazo,

JL