Thursday, March 13, 2008

SUZI QUATRO: I Love Rock And Roll

Bastante se ha hablado de las primeras damas que, en el rock, se pusieron bien los pantalones y, con micrófono en mano, aparecieron delante de un grupo de varones mostrando su poder de liderazgo. No fueron muchas, pero fueron lo suficientemente convincentes como para que se les prestara la debida atención. Y no hablamos de cantantes complacientes que, desde Brenda Lee, hubo en la historia del rock. Hablamos de las que, como Janis Joplin y Grace Slick, fueron parte de la típica banda de rock. Janis con the Holding Company, y la Slick en the Jefferson Airplane.


En mi incipiente fanatismo de púber, ahí, entre mis primeros ídolos de carne y hueso del arte, encontré a Suzi Quatro, una atractiva cantante envuelta en cueros, por lo general negros, con un bajo entre sus manos. Era la primera vez que veía semejante figura. Los bajos, hasta ese momento, parecían haber sido instrumentos hechos para hombres. La imagen de John Entwistle, el tranquilo de The Who, tal vez sea la primera que recuerdo. Bill Wyman, Paul McCartney y Chris Squire, eran los que siempre aparecían en la foto con esa guitarra de cuatro cuerdas. Pero, esta Quatro, aunque norteamericana de nacimiento, llegaba desde el Reino Unido bajo el manto protector de Mickie Most, el famoso productor que un día la vió en su natal Detroit, y -al igual que Chas Chandler había hecho con Jimi Hendrix- la hizo cruzar el Atlántico.

En 1973 la oí en la radio por primera vez. El tema que interpretaba se llamaba "Can the Can", y nunca lo pude encontrar en disco. A principios del 74 recuerdo haber escuchado a Diana García presentándola con "The Wild One", en su clásico show nocturno en Radio Miraflores AM, el que iba de ocho a nueve. Unido a las primeras fotos que aparecían de ella en Pop, la excelente revista de música que por aquellos tiempos se publicaba en Europa, la Quatro ingresó a mi íntimo Rock And Roll Hall Of Fame. A su lado estaban figuras como Alice Cooper, David Bowie y Marc Bolan. Eran los tiempos del glam rock y de Gary Glitter, de quien sí me hice de algunos discos. En el Perú, eran los tiempos del gobierno militar que prohibía la importación de discos angloamericanos, cosa que hacía que cada pieza que encontrábamos, la tratáramos con mucha mayor pasión. Gracias por eso, Velasco Alvarado.


De su primer disco, también salió el "48 Crash" y "Devil Gate Drive". En 1974 lanzó Quatro y, al año siguiente, Your Mama Won't Like Me. Mientras aún duraba su ola, en el 76 publicó Aggro-Phobia y, un año después, el álbum en vivo grabado entre Australia y Japón. Pero no fue hasta 1978-79 en que volvió a las listas, esta vez norteamericanas, con "Stumblin' In", una balada de Nicky Chinn y Mike Chapman, el dúo que tantos éxitos le había escrito desde los primeros años de su carrera. El tema lo grabó con Chris Norman, integrante de Smokie, grupo inglés, también sobreprotegido de Most.

En 1980, llegó a la radio el disco de la película Times Square, en el que se incluía una canción de Suzi Quatro (ahí también estuvieron el "Walk On The Wild Side" de Lou Reed, "Down In The Park" de Gary Numan y "I Wanna Be Sedated" de los Ramones). El título del de ella era "Rock Hard". Y, tal vez, haya sido lo último que popularizó la cantante. Sin embargo, su carrera también tuvo un pico muy alto cuando, como actriz, hizo el papel de Leather Tuscadero, en la serie Happy Days.


Una de las últimas veces que vi a Suzi Quatro en las noticias fue en 2003, en el servicio fúnebre de Mickie Most, el productor que la sacó de The Cradle, el grupo que integraba con sus hermanas, para llevársela a Inglaterra. Era octubre del 71. Dice Jeff Beck que un día fue con Most a la Motown, en donde estaban las Cradle, y, refiriéndose a Suzi, le dijo: "Contrata a ella", y Most lo hizo.

Suzi Quatro no fue ni la mejor bajista ni la mejor cantante. Ni una gran escritora. Simplemente, tuvo la actitud y la osadía de meterse en ese lugar que, en su tiempo, aún no estaba muy bien definido. Lo demás, incluyendo a The Runaways, Joan Jett, Lita Ford, Chrissie Hynde, y un sinnúmero de seguidoras, es historia.

Javier Lishner
Santa Clara, California
13 de marzo de 2008

2 comments:

Javier Moreno-Pollarolo said...

Esa es la comadre más sexy del rock and roll.

Javier Lishner said...

Desde hace mucho yo tengo mi opinión acerca de la comadre más sexy del rock and roll.

Saludos,

JL