Friday, December 07, 2007

GARY GLITTER: El rock en la cárcel

"Es calvo y usa peluca". Con esas palabras, una mujer de 34 años llegó a News of the World tratando de librarse de las garras de Gary Glitter. Aparentemente, la mujer, que alguna vez fue abusada por el cantante, no vio mejor forma de denunciar a Glitter que declarando al diario londinense. A cambio, la dama recibió £10,000 por su historia. Era 1999.

Gary Glitter, cantante y abusador sexual.

Gary Glitter fue, en su momento, una suerte de rey. Fue líder, no necesariamente de una pandilla, como decía su vieja canción, "I'm The Leader of The Gang", sino de un mundo que seguía de cerca los cambios en la música. Glitter empezó a brillar cuando aún la cresta de la ola mantenía en la cima a grandes cantautores como Carole King, James Taylor, Gordon Lightfoot, Carly Simon y Cat Stevens; algunos de ellos, influenciados por el folk y el country & western.

[EL INICIO] Todo comenzó cuando tomó el nombre de su padrastro y formó Paul Russell and his Rebels, su primer grupo. Era fines de los años cincuenta. Paul Francis Gadd nacido en Banbury, Oxfordshire, tenía solo 14 años y ya había conseguido un lugar para rockear: el Club Safari de Trafalgar Square, en Londres. Fue ahí que una de esas tardes conoció a Robert Hartford Davis, su futuro manager quien no solo lo llevó a firmar contrato con la Decca Records sino que lo promovió en los programas de televisión. Para ese entonces andaba utilizando el sobrenombre de Paul Raven. Grabó un disco para Decca que comercialmente no funcionó. En 1961, con Parlophone, con Vic Billings como nuevo representante y George Martin de productor, grabó otros dos que tampoco funcionaron. Fue cuando el músico decidió guardar un rato sus composiciones y dedicarse a la televisión.
Pero, en la televisión, no realizó ningún trabajo ante cámaras (a pesar de que ya había participado en la película Stranger in the City). Ahí, en blanco y negro, asumió el papel de calentar a la audiencia durante el programa Ready Steady Go! O sea, su trabajo era levantar sus brazos en el momento indicado para que el público lo siguiera, y, de paso, los televidentes se la creyeran. No lo hizo tan mal pero lo que sí logró fue conocer a Mike Leander, quien sería fundamental para el próximo paso de su carrera musical.
Gadd contrae matrimonio en 1963, relación que le duraría pocos años. En 1968 Leander se convierte en el mandamás de la MCA Records en el Reino Unido y firma contrato con su protegido. Esta vez lanza un nuevo disco como Paul Monday. Pero, para su mala suerte, tampoco le funcionó. Un año después, bajo el seudónimo de Rubber Bucket, produce un tema titulado "We are all living in One place", el que se lanza frente a las mismas oficinas de la MCA sin mayor repercusión. Para fines de año, vuelve al ruedo como Paul Monday, pero la fortuna tampoco le favorece.


"I'm the Leader of the Gang". Glitter en su esplendor.

En 1970, aparece "Stand", el último con la MCA, con la que concluye sus relaciones más no su amistad con Leander. Ese mismo año, firma contrato para ser parte del disco Jesus Christ Superstar, compuesto por Tim Rice and Andrew Lloyd Webber, en el que Ian Gillan interpretó el papel de Jesús. Y, con Gillan y un puñado más de artistas, pudo saborear su primer triunfo. Paradójicamente, representó el papel de The Priest.

[EL REINADO] A partir de 1971, las cosas cambiarían completamente. Detrás de Gadd nace una estrella, tan brillante como su nuevo nombre, Gary Glitter. Bell, su nuevo sello discográfico, lanza el simple "Rock and Roll (Parts I and II)", los dos como lados A. La parte 2 es la que anduvo mejor. Y, Paul Gadd, ahora como Gary Glitter, finalmente, se intersectó con las listas no solo en Inglaterra y Estados Unidos sino en varios países de Europa y Latinoamérica. Acto seguido, Bell, el sello discográfico neoyorquino fundado en 1954, publicó "I Didn't Know I Loved You (Till I Saw You Rock 'n Roll)" que también se convirtió en éxito. En noviembre, el artista ve el sueño del primer álbum propio, que llega rápidamente al Top 10 en el Reino Unido. Se llamó, simplemente, Glitter. El 73 lo inicia con "Do You Wanna Touch Me? (Oh Yeah)", el que lo vuelve a poner en las listas. Lo mismo sucedería con "Hello, Hello, I'm back again" y "I'm the Leader of the Gang (I Am)". Con "I Love You Love Me Love" llegó directo a número uno. Antes de fin de año, se lanza Touch Me, su segundo álbum.
En ese momento, Glitter es el rey absoluto. A su lado andaban otros, maquillados y simplones, como mis favoritos Sweet y Slade, que, aunque también populares, solo le hacían la corte. El glam-rock andaba en su máximo esplendor y había encontrado a su líder, un inglés de cinco pulgadas y medio de altura, mucho cabello, y exagerados atuendos. Sin embargo, ni Glitter ni el glam-rock (esa música popera, pegajosa e intrascendente a los oídos de Mozart), duraron mucho.
Muy pronto, a pesar de sus siguientes lanzamientos y de los esfuerzos de algunos, como Marc Bolan y su T. Rex, el glam pierde terreno ante otro monstruo que venía trabajando desde principios de la década, y ya lo tenía todo: el rock progresivo.

[EL OCASO] Las giras empiezan a serle desfavorables, se dedica al licor y las drogas; y, el sobre peso, termina por hundir al que una vez fue primera plana de las revistas juveniles. Glitter llega a 1980 en bancarrota. Sus pertenencias, incluidos sus costosos atuendos de sus días de gloria, fueron vendidos. El artista, por más de sus denodados esfuerzos, nunca más volvería a brillar como la primera vez. Pero eso no fue todo.

Glitter frente al Juez. Sin peluca y acabado.

Gary Glitter, en silencio, se hundía en otra mala costumbre. Y, eso, sus seguidores, aún no lo sabíamos. Hubimos muchos que hasta lo aplaudimos cuando lo apreciamos como parte del elenco de la gira Quadrophenia, la obra de Pete Townshend interpretada por The Who. Esa noche lo vimos con júbilo en el papel de The Godfather. Y solo un par de años después, la mala costumbre se descubriría de mera casualidad.

[EL ACOSO] Las Spice Girls, estaban en todo su esplendor. Era 1997, y una de las nuevas canciones que comenzaban a promocionar a través de su película Spice World, era la de "el jefe de la pandilla". Irónicamente, el año de la película sería el de su despedida. En una escena del filme, aparecen las cinco jovencitas al lado de un maduro Gary Glitter, co-escritor de la canción.
El mes de noviembre, en Bristol, cuando el otrora rey del glam llegó a la tienda PC World a recoger su computadora laptop -la que había dejado para reparación-, fue interceptado y arrestado. Se había hallado pornografía infantil en su aparato. Sus dos residencias fueron investigadas y se le encontraron más fotos. Esa vez, la policía lo dejó en libertad bajo fianza.
En marzo de 1998, Glitter fue acusado de abuso infantil a una niña de 8 años, entre 1975 y 1977, y de tener relaciones con una joven de 15 en 1980. Esta última fue Alison Brown, quien hizo la denuncia al News of the World.
El nuevo siglo encuentra a Glitter residiendo Camboya de donde es desalojado por sospechoso; luego se va a Vietnam, en donde la Justicia lo halla nuevamente desalineado. Es ahí donde actualmente se encuentra pagando pena de cárcel por las malas costumbres de toda la vida. Su libertad está programada para agosto de 2008, aunque -según su abogado- podría salir un poco antes.
Con las fiestas navideñas ad portas, posiblemente, volveremos a escuchar "Another Rock and Roll Christmas", la única canción que, en los últimos treinta años, lo volvió a meter en las listas. Fue en 1984. Aunque los medios, como es natural, siguen reacios a publicitar a esta joya.

NOTA: Leí que hasta 1997, uno de cada sesenta ingleses, había visto a Gary Glitter por lo menos una vez en su vida. Habría que ver qué pasó en los últimos diez años.

Javier Lishner
Santa Clara, California
7 de diciembre de 2007

2 comments:

Anonymous said...

hola javi:horrible historia.nunca escuche su nombre pero si esa cancion.quese pudra entre rejas...saludos.
maricielo

Javier Lishner said...

Maricielo:

El tema en cuestión fue muy popular, tanto como los otros. Lamentablmente, la falta de dos dedos de frente, y el respeto, le acabaron su carrera.

Saludos,

JL