Sunday, May 27, 2007

En el nombre del Padre y del Hijo
ENTRE CRUCES Y OTROS AMULETOS


Es muy posible que la primera vez que vi una cruz al lado de uno de mis ídolos de infancia haya sido una que andaba en el fondo de un escenario de Black Sabbath. Fue la primera gran impresión que me causó al ver un símbolo tan respetado en medio de música que parecía diabólica. Luego entendería el significado del nombre del grupo de Birmingham, cuya imagen era un hijo de la guayaba llamado Ozzy Osbourne. Pero Osbourne no era el único hijo de la guayaba. A su lado había otro sujeto, generalmente vestido de negro, que también adornaba su vestuario con una gran cruz que le pendía del cuello. Su nombre era Tony Iommi, el encargado de la guitarra y, a la postre, también, la pieza angular de mantener a Black Sabbath alejado de los cementerios, lugar adonde fueron a dar, paradójicamente, otros más angelicales. El grupo
Pilot (con alitas y todo), por ejemplo.

Black Sabbath con Ozzy o sin él.

Blue Öyster Cult, en los Estados Unidos, asumió el mismo símbolo religioso como parte de su campaña de mercadeo. Las letras de sus canciones, incluían fuego y flamas, las que, en vivo, rodeaban las cruces casi en cada escenario que visitaban. Al lado estaba la espada. "Cities On Flame With Rock And Roll", "Hot Rails to Hell" y "Career of Evil" son solo un ejemplo del camino que tomaron. La cruz y la espada representaba a Saturno, el dios romano. BÖC fue otro de los que se atrevió a hacer su propia versión de "Born To Be Wild", de Mars Bonfire, conocida en el mundo gracias a Steppenwolf.

Alice Cooper -bautizado Vincent Furnier-, a lo oscuro, le añadió sangre y serpientes, lo que hizo su aparición en escena un tanto más atrayente. A los reptiles los complementó con letras de las que (nunca antes) nadie había escrito. Como, "School's Out" y "Only Women Bleed". Cuentan que el nombre del grupo, que luego lo asumió como propio, fue tomado de una dama quemada viva en Salem, luego de ser acusada de brujería (aunque años más tarde, cuando ya se había alejado del alcoholismo, daría otra versión). Este sí fue un verdadero hijo de puta, como diría CacaoRock al referirse a Alvin Lee, el contemporáneo guitarrista de Ten Years After. Antes que nadie, Cooper, incluyó en sus espectáculos, desde guillotinas hasta sillas eléctricas, abriéndole los ojos a muchos sobre lo que podía llegar a hacer el hijo de un Ministro de la Iglesia, o lo que ello signifique.

Iron Maiden Ensemble. (Celebrity Pictures Archive).

Un lustro más tarde, apareció Iron Maiden utilizando muchos de los amuletos que venían mostrando Alice Cooper, Blue Öyster Cult y Black Sabbath. A eso le agregó escenas de horror y, a Eddie, su inconfundible mascota, con el que los vimos 2 Minutes to Midnight en 1985. De sus inicios, recordamos los álbumes, Killers, de 1981, y The Number of the Beast, o sea, el 666, de un año después. De los noventa, No Prayer for the Dying y, del nuevo milenio, Dance of Death, y A Matter of Life and Death. Los títulos de sus discos son más que sugestivos. Por esas cosas de la vida, el nacimiento de Maiden fue, como Jesucristo, un 25 de diciembre.

Regresando a los Estados Unidos, Metallica, también le hizo al juego del oscurantismo en el rock. El grupo californiano, que tuvo influencias de Maiden y, posiblemente, de Motörhead, no se formó el día de Navidad, pero su primer viaje fuera de California (para residir en New York), lo hizo un 1 de abril que, en la Unión Americana, es el Día del Tonto. Estando allá, en la otra costa, fue cuando una mañana, James Hetfield y Lars Ulrich, despertaron a (Dave) Mustaine, para informarle que estaba fuera del grupo. Casi inmediatamente llegaba (Kirk) Hammett, melodioso alumno de Joe Satriani. En 1984, la gira Seven Dates of Hell, los convirtió en teloneros de Venom, reyes del black metal y otro de sus santos de adoración. Luego vendría la muerte de Cliff Burton, su bajista, y la llegada de Jason Newsted. Lo demás es historia conocida, incluido su disco más lóbrego ...And Justice for All.

Rob Zombie. Sin pelos en la lengua.

No sabría cómo definir la música de Rob Zombie. Lo cierto es que con él, hablamos de una nueva generación de rockeros sin pelos en la lengua (solo en la lengua). La Sexorcisto: Devil Music, Vol. 1, fue su Big Break, en 1992, cuando aún andaba con su banda, White Zombie, la que había formado en New York en 1985. Años después, cuando decidió una carrera solista, lanzó un disco con temas como "Living Dead Girl" y "Dragula" ("Superstition, fear and jealousy"), que lo mantuvo en el mismo sendero, entre lo oscuro e industrial, entre lo metálico y gótico, no sé. Pero siempre fuerte y claro. Zombie, también, ha escrito películas como the Werewolf Women of the S.S., y, recientemente, The Haunted World of El Superbeasto, las que no parecieran muy santas.

Non-Sancto Marilyn Manson. Video de "Rock Is Dead".

Los Angeles ha sido cuna de muchos engendros del rock. Uno de ellos es Marilyn Manson, una especie de no sé qué, que, a punta de huevos, se hizo un nombre dentro de la bien poblada ciudadela del rock. Cuando hace ya mucho tiempo vimos por primera vez su foto, lo primero que se nos vino a la mente fue, "copión del diablo". Y, claro, aunque nada es nuevo bajo el sol, Manson tuvo que -al igual que Alice Cooper- saturarse de maquillaje y, como si no fuera suficiente, adoptar un nombre de mujer. Así, parecíase más al original. Y, como ninguno de los dos canta muy bonito, su semejanza fue aún mayor. Sin embargo, Manson, a pesar de los veinte años (de adelanto) que lo separa de Cooper, llegó un poco más lejos con su mensaje obsceno, el que lo ha ahuyentado de más de un escenario, seguramente, manejado por fariseos e hipócritas. Yo lo ví y me gustó. Con su Antichrist Superstar o no. Y me gustó mucho más de lo que me hubiera imaginado. Por lo menos, con la cruz en el pecho, o detrás de su escenario, lo veo más sincero y real, que el mismísimo Papa cuando baja del avión en Brasil, con una cruz tan grande, cuyo brillo molesta.

Javier Lishner
Santa Clara, California
27 de mayo de 2007

4 comments:

All Blog Spots said...

nice blog

Javier Lishner said...

Thank you for visiting the blog.
Regards,

JL

Anonymous said...

I found it by chance. Remember those shows at the Pub Suizo, 1989? Greetings from Phoenix, AZ,

RM

Javier Lishner said...

Yeah! Those evenings at the Pub Suisse are full of good memories. A few days ago I mentioned it while writing an article about Ten Years After http://javierlishner.blogspot.com/2007/05/cuarenta-aos-despus-ten-years-after-hoy.html
Thank you for visiting the blog from Phoenix.

JL