Ian Gillan.
"No quiero saber nada de Ritchie... nunca más", le dijo a Charlie Steffens, en entrevista concedida a fines del año pasado. Lo que sucedió en 1994, cuando Blackmore dejó a medias la gira en Europa, es algo personal que ha decidido nunca contar (Eso dicen todos, y hacen más interesante la historia. En el fútbol la cosa parece ser diferente. El italiano Marco Materazzi acaba de declarar lo que le dijo a Zinedine Zidane en la final de la Copa del Mundo).
Gillan y Blackmore compartían la habitación del hotel y el guitarrista abandonó la tour cuando aún faltaba Japón, uno de los bastiones para cualquier integrante de la familia Purple. A última hora, encontraron a Joe Satriani con quien pudieron cumplir y completar la agenda. El guitarrista norteamericano, con un disco ad portas su respectiva gira, viajó, tocó, cobró y se fue. En esos momentos, según Gillan, llegó la luz al grupo. "La noche que Ritchie nos abandonó, desaparecieron las nubes", dijo. La llegada de Steve Morse, finalmente, hizo que el legendario quinteto lograra la estabilidad que nunca había tenido. Y así están.
Nuestro pase de prensa en la gira solista 92.
DP pasó por aquí hace unos días y se le vió muy bien cohesionado. Se nota, se siente, se escucha. Mientras que allá en Europa, Ritchie también anda feliz con su media naranja, Candice Night, en lo que desde mediados de los noventa se conoce como Blackmore's Night. Su música es lo que llaman "renacentista", con instrumentos de la época y todo.
Durante su cuarto de hora, Ian Gillan hizo la voz de Jesús en la ópera Jesus Christ Superstar de Tim Rice y Andrew Lloyd Webber, en 1970. Más tarde, cuando le propusieron el papel principal en el film, pidió una fuerte suma (pues su grupo DP estaba en la cima). Y se dió el lujo de pedir dinero para todos los integrantes de la banda, pues, rodando él la película en Israel, DP debía cancelar una gira. No le aceptaron. El rol se lo dieron a Ted Neeley.
Santa Clara, California
19 de agosto de 2007
No comments:
Post a Comment